El retorno de más de un millón de refugiados es la clave para la recomposición de Bosnia-Herzegovina y será prioridad del gobierno elegido los días 12 y 13, declaró Alija Izetbegovic, titular de la presidencia colectiva de este país.
Las elecciones generales crearon las condiciones para la restauración de la unidad del país, dijo Izetbegovic tras el anuncio del resultado de los comicios.
Izetbegovic obtuvo más de medio millón de votos y se mantuvo con facilidad en la banca musulmana de la presidencia tripartita con representación de musulmanes, serbios y croatas.
El resultado fue divulgado el viernes por la Organización para la Seguridad y la Cooperación de Europa (OSCE), el organismo internacional que supervisó los comicios.
Izetbegovic dijo que el respaldo popular a su coalición de cuatro partidos se mantuvo porque esta defendió la unión de Bosnia- Herzegovina, la democracia, los derechos humanos y el retorno de los refugiados.
"No eran para nada eslóganes nacionalistas o extremistas, sino respuestas muy razonables a nuestros problemas", dijo, y agregó que serán despedidos los funcionarios que no comprendan la importancia central de la repatriación de los refugiados.
La mayor parte del millón de refugiados fue desplazada por campañas de "limpieza étnica" emprendidas por nacionalistas radicales durante la guerra civil que asoló a Bosnia-Herzegovina entre 1992 y 1995. La oposición a su retorno, en ocasiones violenta, sigue siendo un grave problema y un obstáculo para la paz.
Las elecciones generales de este mes produjeron un complicado panorama político.
En la elección simultánea por la presidencia de la entidad serbia de Bosnia, una de las dos entidades étnicas creadas por los acuerdos de paz de Dayton de 1995, la presidenta Biljana Plavsic fue sustituida por el nacionalista de línea dura Nikola Poplasen.
Por el contrario, el integrante serbio de la presidencia nacional, Momcilo Krajisnik, fue desplazado por el más moderado Zhivko Radisic.
Los partidos étnicos siguen dominando los poderes ejecutivos y los legislativos locales de la entidad serbia y la federación musulmano-croata, aunque con una proporción menor de los votos, mientras los partidos de oposición no étnicos tuvieron grandes avances.
El nacionalista croata Ante Jelavic desplazó de la banca croata de la presidencia al más moderado Kresimir Zubak, el candidato preferido de la comunidad internacional. Jelavic obtuvo 189.408 votos.
Un candidato de centro, Gradimir Gojer, del Partido Social Demócrata, salió segundo en las elecciones croatas, con 113.947 votos. El resultado sorprendió a muchos analistas e indica el creciente respaldo que recibe el centro del espectro político.
En la disputa por la banca serbia, Krajisnik, opositor de los acuerdos de Dayton, obtuvo 315.480 votos, frente a los 360.286 de Radisic, quien se comprometió a implementar el acuerdo de paz.
Radisic presidirá el ejecutivo tripartito durante ocho meses, sustituyendo a Izetbegovic, lo que impide que Krajisnik, quien durante la guerra luchó contra la independencia de Bosnia- Herzegovina, se convierta en presidente de este país.
"Creo que la presidencia funcionará mejor que antes. Estimo que habrá una mayor cooperación", declaró Izetbegovic.
En la carrera por la presidencia de la entidad serbia, Poplasen obtuvo 324.033 votos, Plavsic 286.914 y Zulfo Nisic, del izquierdista Partido de los Bosnios, recibió 107.037.
El sorprendente apoyo que recibió Nisic se consideró una de las razones de la derrota de Plavsic, ya que dividió a los electores que no se sintieron atraídos por el programa electoral nacionalista de Poplasen.
Poplasen defiende la unión entre la entidad serbia de Bosnia y la propia Serbia, el mismo factor que provocó la guerra civil, aunque para participar en las elecciones tuvo que acatar los acuerdos de Dayton, un paso que dio con reticencia.
El español Carlos Westendorp, alto representante de la comunidad internacional en Bosnia, dijo el viernes que el nuevo presidente de la entidad serbia deberá regirse estrictamente según las condiciones de los acuerdos de paz.
El embajador Robert Barry, de la OSCE, opinó que los analistas tienden a concentrarse en la victoria de Poplasen, mientras los resultados de los comicios "muestran la prevalencia de la tendencia por la que trabajamos".
"Se continuó el proceso de erosión del respaldo a los partidos nacionalistas. Todos ellos perdieron votos en las elecciones legislativas", agregó.
Además de la alta votación de su candidato presidencial, Gradimir Gojer, los socialdemócratas se convirtieron en el principal partido no étnico de la federación musulmano-croata y aumentaron su representación en el legislativo de la entidad serbia.
Las elecciones generales fueron las segundas realizadas en Bosnia desde los acuerdos de paz de Dayton. Votaron 1.879.339 personas, lo que representó casi 71 por ciento de los electores habilitados, una cifra más baja de la prevista.
"Hay más pluralismo, más moderación en Bosnia-Herzegovina como resultado de estos comicios", sostuvo Westendorp, cuya función es la de controlar la aplicación de los acuerdos de Dayton.
Está en descenso el apoyo a "los partidos nacionalistas más extremistas y hay mayor oposición en ambas entidades y en las tres poblaciones constituyentes. Las instituciones centrales mejorarán como resultado de las elecciones".
"Ahora hay tres integrantes de la presidencia con los que la comunidad internacional confía que puede cooperar. En el pasado resultó imposible trabajar con Krajisnik", aseguró.
Westendorp señaló que los nacionalistas radicales no recuperaron la mayoría absoluta en la entidad serbia, lo que desalentará los desvíos de los acuerdos de Dayton.
"Ello indica la posibilidad de continuar la cooperación con la entidad serbia a pesar de la elección de Polasen", declaró. (FIN/IPS/tra-en/ks/rj/aq/ip/98