La posibilidad de una reunión en Asunción entre los presidentes Jamil Mahuad, de Ecuador, y Alberto Fujimori, de Perú, para reanudar las negociaciones de paz, quedó abierta hoy, cuando el primero anunció que asistirá este sábado a la transmisión del mando en Paraguay.
Mahuad revisó su decisión inicial de no viajar a Asunción después de que Ecuador y Perú firmaron en la noche del jueves un acuerdo para separar sus tropas en la zona amazónica del Alto Cenepa, el territorio en disputa por el que los dos países libraron una guerra en 1995.
El presidente ecuatoriano reiteró en conferencia de prensa su invitación a Fujimori a volver a la mesa de negociaciones, "que es donde todos los problemas deben resolverse".
Mahuad expresó satisfacción por el acuerdo de separación de fuerzas logrado por la Misión de Observadores Militares Ecuador- Perú (MOMEP), que desde 1995 supervisa el alto el fuego en el Alto Cenepa, y dijo que la solución definitiva del conflicto fronterizo dependerá "de que encontremos una fórmula satisfactoria" para los dos países.
La MOMEP está integrada por representantes de Argentina, Brasil, Chile y Estados Unidos, los cuatro países garantes del Protocolo de Río de Janeiro, que en 1942 puso fin a otra guerra entre Ecuador y Perú. Los países garantes patrocinan también las negociaciones de paz en curso.
El acuerdo logrado establece una zona desmilitarizada de 50 kilómetros de longitud y tres de ancho, al sur de la que hoy existe en la zona de conflicto.
La tensión entre Ecuador y Perú aumentó la semana última, cuando el gobierno peruano denunció la infiltración de tropas ecuatorianas en su territorio.
Ecuador respondió que hubo movimientos de tropas de los dos países en la zona fronteriza, pero que mal podía hablarse de "infiltración" de soldados en un área concreta cuyos límites no están trazados.
La separación de tropas empezó a realizarse este mismo viernes y, según inormaciones extraoficiales divulgadas en Quito, finalizarla podría llevar una semana.
Diario Hoy, de Quito, comentó en un editorial que "los esfuerzos de los garantes para disminuir la artificial tensión militar creada por Fujimori en la frontera, está dando resultados positivos".
El periódico opinó que el presidente peruano, "cuya popularidad está en el momento más bajo desde que llegó al poder, ha logrado galvanizar a la opinión pública peruana detrás de su tesis del territorio peruano 'invadido por Ecuador".
El Comercio, por su parte, en un análisis que tituló "Las lecciones del microsismo", afirmó que la solución a las tensiones de los últimos días probó que "la instancia de los Garantes volvió a funcionar", y que esos países "en buena medida se están convirtiendo en árbitros".
El matutino coincidió con el resto de la prensa ecuatoriana en comentar que, mientras los garantes y la MOMEP "han creado instancias para resolver quejas y demandas, Perú, en vez de utilizarlas, quiso sorprenderlos".
El análisis concluye en que la crisis ha probado "que si los militares pesan, de un lado y otro, y si los diplomáticos vuelven a entrar en el terreno de juego, la solución será estrictamente política".
Dirigentes políticos ecuatorianos saludaron el acuerdo de separación de tropas y la posibilidad de reanudar las negociaciones de paz. El diputado Heinz Moeller, ex presidente del parlamento, aseguró que el Congreso apoya la propuesta del gobierno de Mahuad "de mantener la mano extendida (a Perú), y esperamos una actitud similar" de Lima.
"Ecuador es un país pacífico, pero no con menos derecho a buscar una paz consensuada y no impuesta", advirtió Moeller.
El Ministerio de Defensa señaló que un soldado de las fuerzas de Perú atacado por una serpiente venenosa en la zona en conflicto fue atendido mpor fuerzas ecuatorianas a pedido de oficiales peruanos. Este hecho, dijo el Ministerio, prueba el espíritu de solidaridad de las Fuerzas Armadas ecuatorianas.
El ministro de Defensa, José Gallardo, confirmó también que otro soldado ecuatoriano resultó herido por explosión de minas antipersonales sembradas en la zona, aunque dijo que esperaba más información al respecto.
Informaciones procedentes de Buenos Aires atribuyeron importante papel al canciller argentino Guido Di Tella en el acuerdo alcanzado el jueves. Di Tella estuvo el lunes en Quito, en la asunción de Mahuad como presidente, y se desplazó luego a Lima, donde actuó como nexo entre los dos gobiernos. (FIN/IPS/amr/ff/ip/98