La nacionalización del sector petrolero de Colombia que propone el rebelde Ejército de Liberación Nacional (ELN) en la negociación de paz es percibida por sectores del gobierno como un obstáculo.
En el Acuerdo de la Puerta del Cielo, que abrió el proceso de paz, el ELN condicionó la suspensión de ataques a oleoductos que efectúa hace 13 años a la realización de un foro que proponga al Congreso cambios "de conveniencia nacional" para proteger "la soberanía y los recursos naturales".
Según el acuerdo firmado el 15 de julio en Maguncia, Alemania, el Foro Nacional Energético discutiría "el desarrollo del sector (…) como base para reestructurar una economía nacional fuerte y soberana que contribuya a la paz con justicia social".
El gobierno, en principio, dio el jueves su aval a la realización del foro, que, según el ministro de Minas, Luis Valenzuela, "debe mirarse dentro de un contexto general de la política para la paz y la convivencia de los colombianos".
Valenzuela dijo en un debate sobre petróleo y políticas de paz convocado por la Cámara de Diputados que la asistencia al foro será una decisión de alto nivel en el gobierno que encabeza Andrés Pastrana.
No obstante, Valenzuela afirmó que está dispuesto a sostener "una reunión técnica y es probable que profundamente aburrida" para analizar qué puede hacer en materia de paz la estatal Empresa Colombiana de Petróleos (Ecopetrol).
Según el funcionario, el gobierno está atento a escuchar "las diferentes posiciones" al respecto, pero también "tiene la responsabilidad de tomar las decisiones requeridas para mantener el autoabastecimiento de hidrocarburos con excedentes exportables".
Con esa orientación del saliente gobierno de Ernesto Samper, Ecopetrol modificó en los últimos cuatro años el sistema de contratación con multinacionales para la explotación del crudo, cambios que han sido criticadas por el ELN y por la Unión Sindical Obrera (USO), que nuclea a los trabajadores del sector.
Enrique Amorocho, presidente de Ecopetrol, sostuvo que, si no se intensifica la actividad exploratoria y no se incentiva la participación de inversionistas extranjeros, Colombia se verá en la necesidad de importar patróleo en dos o tres años.
Las reservas colombianas de petróleo son de 3.000 millones de barriles.
Pero el ELN considera que en Colombia ha existido un comportamiento "entreguista" por parte de la clase gobernante respecto de sus recursos naturales.
Milton Hernández, uno de los firmantes del Acuerdo de la Puerta del Cielo en representación del ELN, planteó en nombre de su organización que "las ganancias del petróleo se inviertan en desarrollo social".
Hernández sostuvo que las regiones de explotación petrolera son también centros de "alcoholísmo, prostitución y degradación" de la sociedad por la falta de una política de desarrollo social por parte del Estado.
Para protestar contra la política petrolera, el ELN comenzó en 1985 a atacar de forma sistemática los oleoductos, acciones criticadas por ambientalistas y que, según Ecopetrol, causaron pérdidas de más de 1.800 millones de dólares a una industria que genera ganancias por 2.000 millones de dólares al año.
El ELN sostiene que el sistema de hidrocarburos del país se ha regido por "una recopilación de leyes hechas a la medida del capital extranjero", según un documento de diagnóstico al que tuvo acceso IPS.
La organización insurgente cuestiona también la ausencia de planificación del sector, altos endeudamientos financieros que obligan a realizar "megaproyectos inútiles", el debilitamiento de Ecopetrol y el crecimiento orientado hacia las exportaciones con sacrificio del consumo interno.
El ELN plantea para la discusión previa a la realización del foro una reunión en la que participen la USO, sindicato único de los trabajadores petroleros, y Ecopetrol, para discutir "una alternativa de manejo soberano de hidrocarburos".
No obstante, Hernándo Hernández, presidente de la USO, afirmó el jueves ante la Cámara de Diputados que esa organización no pretende nacionalizar la industria petrolera.
"Lo que pretendemos es una forma democrática basada en el fortalecimiento de Ecopetrol y una participación del capital privado" nacional y extranjero, pero "sobre la base de la soberanía y del interés nacional", dejo Hernández.
En opinión del dirigente sindical, quienes afirman que el sindicato busca la nacionalización de la producción petrolera, "lo hacen para estigmatizar y 'macartizar' nuestras propuestas". (FIN/IPS/yf/mj/ip if en/98