La llegada al gobierno en Colombia y Ecuador de dos dirigentes de la Unión Mundial para la Conservación de la Naturaleza (UICN) dará impulso a la solución de problemas ambientales en América Latina.
Yolanda Kakabadse, presidenta de la UICN, será ministra de Medio Ambiente en el gobierno de Jamil Mahuad, que se instalará el lunes en Ecuador.
Mientras, Juan Meyer, también del directorio de la UICN, es titular de Medio Ambiente en el gabinete del nuevo presidente de Colombia, Andrés Pastrana, que este viernes prestó juramento formal.
Kakabadse informó a IPS que ha acordado con Mayer "promover un diálogo regional" latinoamericano sobre aspectos como la biodiversidad, la propiedad intelectual de los recursos genéticos y la convención sobre desertización, tema que está en proceso de negociación en la Organización de las Naciones Unidas.
La futura ministra añadió que será necesario también renovar el diálogo internacional sobre el cambio climático, "para que todos los países y las personas sepan cuál puede ser su contribución a las políticas para combatir el efecto invernadero".
A su juicio, las cuestiones ambientales deben tener mayor presencia institucional y tratamiento de política de Estado.
"América Latina comparte no sólo los mismos ecosistemas (la cuenca del Pacífico y la cuenca Amazónica), sino los mismos problemas de gobernabilidad" y por eso debe actuar coordinadamente, explicó.
Organizaciones no gubernamentales (ONG) del área ambiental comentaron el nombramiento de Kakabadse como un acierto del gobierno entrante.
Teodoro Bustamante, presidente de la Fundación Natura, la más antigua ONG ambiental de Ecuador, dijo a IPS que Kakabadse "ha sido una pionera del ambientalismo y tiene una larga trayectoria y competencia".
Bustamante demandó urgentes reformas legales para clarificar la legislación ecuatoriana en materia de ambiente. "Hay poca claridad y aún confusión entre las responsabilidades institucionales y no se aprovecha la cooperación internacional", advirtió.
También indicó que nuevo gobierno deberá enfrentar urgentemente la tala de manglares, que se realiza para la instalación de pisicinas camaroneras. Más de 50 por ciento de los bosques de manglares ya han sido destruidos.
El camarón es el tercer rubro en importancia en las exportaciones de Ecuador, tras el petróleo y el banano, con ventas superiores a los 500 millones de dólares anuales.
"Es posible llegar a acuerdos para proteger el manglar y promover la industria camaronera", declaró Kakabadse, quien se comprometió a promover soluciones.
Así mismo, anunció que buscará establecer políticas para que Ecuador produzca "un petróleo verde". Ecuador extrae alrededor de 280.000 barriles diarios de crudo, la mayoría para la exportación.
Indígenas de la Amazonia ecuatoriana llevaron a juicio a la petrolera Texaco, de Estados Unidos, que extrae petróleo en este país desde hace 25 años, acusándola de causar grave contaminación en el medio en que residen.
La empresa estatal Petroecuador ha intentado establecer políticas ambientalmente sustentables, pero sin éxito. Sólo este año Petroecuador pudo eliminar la producción de gasolina con tetraetilo de plomo, un factor de alta contaminación.
Los indígenas amazónicos pretenden obtener una participación de dos por ciento de los ingresos petroleros, para remediar los problemas de contaminación y salud que la industria causa en la selva, y han llegado a secuestrar por varios días a empleados de la petrolera estadounidense Arco como medida de presión.
Hasta 1996, más de 80 piscinas de petróleo contaminaban los ríos y los cultivos en áreas de comunidades nativas. El juicio a Texaco obligó al gobierno a negociar con esa empresa la limpieza y descontaminación de las piscinas.
Kakabadse dijo también a IPS que entre sus prioridades se cuenta el trazado de claras líneas de acción en el manejo de recursos naturales no renovables como bosques, agua, aire, cuencas hidrográficas, manglares y pesca.
En Ecuador se talan anualmente alrededor de 300.000 hectáreas de bosques, y apenas se reponen 10.000. La ministra designada señaló que será necesario otorgar estímulos a la reforestación "para que sea tan atractivo reforestar como comprar una vivienda".
Agregó que los ríos ecuatorianos son vertederos de los desechos de las ciudades y las industrias, y que se propone cambiar esa situación.
Las aguas del río Machángara, que atraviesa Quito, están contaminadas por residuos industriales y domiciliarios, pero se utilizan para el riego de cultivos en los valles cercanos, según se advirtió en un estudio ambiental.
Todos los problemas serán enfrentados "con decisión política", aseguró Kakabadse, que exhortó a los miembros del equipo económico de Mahuad a "construir una relación directa entre crecimiento económico y sustentabilidad". (FIN/IPS/amr/ff/en/98
