Sudáfrica, Swazilandia y Mozambique decidieron convertir en hechos la retórica sobre el renacimiento de Africa mediante un proyecto de desarrollo conjunto que apunta hacia un territorio compartido por las tres naciones: el de las majestuosas montañas Lubombo.
La Iniciativa de Desarrollo Espacial de Lubombo (IDE) fue lanzada hace cuatro meses y se concentra en la zona este de Swazilandia, en el noreste de Sudáfrica (provincia de Kwazulu- Natal) y en la parte sur de Mozambique.
El programa pretende aprovechar para el desarrollo las riquezas de esta región, con terreno apropiado para la agricultura, numerosos atractivos turísticos y abundante mano de obra. La combinación de estos recursos debería generar iniciativas rentables.
"Nosotros, como gobierno, queremos concentrarnos en sectores que generen más empleos, como la construcción de ferrocarriles, puentes, carreteras. La forma más poderosa de lograr el desarrollo es un empleo", dijo el representante del Departamento de Industria y Comercio de Sudáfrica, Paul Jourdan.
La IDE compromete a los gobiernos a la construcción de infraestructura básica en la región con el fin de hacerla más atractiva para los inversionistas privados, quienes hasta ahora se han mantenido alejados de esta zona montañosa.
Los tres países enfrentan dificultades para conquistar sus metas de desarrollo, y todos esperan obtener beneficios de esta iniciativa conjunta.
Sudáfrica logró la paz tras las elecciones de 1994 y desde entonces lucha para tratar de reconstruir una economía devastada por cuatro décadas de segregación racial. "Como resultado del apartheid, el trabajador promedio tiene sólo tres años de educación, y el minero ninguno", dijo Jourdan.
En Mozambique, la guerra civil duró 17 años y lo convirtió en uno de los países más pobres del planeta. Entre 1981 y 1986, el producto interno bruto de este país de 18 millones de habitantes bajó 3,5 por ciento al año.
El presidente de Mozambique, Joachim Chissano, opinó que la IDE "simboliza la determinación de nuestros países para cooperar en la promoción del crecimiento, la reconstrucción y el desarrollo".
"Queremos terminar con esa paradoja de pobreza en medio de la abundancia, de privaciones cuando existe un potencial para la prosperidad, y de carencias de servicios sociales básicos en una zona rica en recursos", manifestó Chissano.
Uno de cada tres mozambiqueños que habitan la zona de la IDE sobrevive practicando agricultura de subsistencia, mientras los servicios de salud son escasos y la proporción de analfabetos muy alta.
La Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza ya completó la primera fase de un estudio para elaborar protocolos que permitan establecer marcos para la conservación de recursos marinos y terrestres en la IDE, que cuenta con 10 áreas de protección a la vida silvestre.
Entre tanto, los ministerios del Interior acordaron darle prioridad a una estrategia para establecer un sistema de visas y controles fronterizos similar al de la Unión Europea, que faciliten el tránsito de las personas a través de la IDE.
Pero el gerente de una fundición de aluminio en Maputo, Peter Cowie, advirtió que por ahora se trata de "un sueño en un pedazo de papel" puesto que "falta mucho para lograr libertad de movimiento de las personas a través de las fronteras".
El desafío más grande de la IDE será armonizar las políticas nacionales, en especial si se considera que se trata de tres países con sistemas distintos.
A los países de menores dimensiones, sin embargo, la IDE les permitirá beneficiarse de inversiones realizadas por Sudáfrica.
"Debemos trabajar mucho para asegurarnos de que los tres países operen en forma coordinada. Sudáfrica tiene una economía más poderosa, pero entendió que su propio desarrollo está vinculado al de sus vecinos", señaló el director de la IDE, Andrew Zaloumis. (FIN/IPS/tra-en/gm/pm/lc-ml/dv/98