La calma vuelve a Togo tras el alzamiento popular que siguió a las irregulares elecciones del mes pasado, cuyos resultados anunciados por el gobierno confirmaron en el poder al presidente Gnassingbe Eyadema.
Eyadema está en su cargo desde 1967, cuando dio un golpe de Estado.
El 23 de junio, 48 horas después de la realización de los comicios, los resultados electorales fueron retenidos. Por motivos no revelados, el conteo en Lomé se detuvo tras el escrutinio en 35 de los 317 centros de votación.
La situación condujo a la renuncia del director de la Comisión Nacional Electoral y el acoso de cuatro miembros del cuerpo.
Pero el parlamento, dominado por la gobernante Agrupación del Pueblo Togolés, demandó que la oposicion reconociera la victoria de Eyadema.
"Este es un asalto electoral. El presidente quiere robar la victoria de Gilchrist Olympio. Nunca nos rendiremos a la dictadura de Eyadema", dijo el secretario general del principal partido opositor, la Unión para las Fuerzas del Cambio, Jean-Pierre Fabre, después del incidente.
El anuncio desató demostraciones callejeras de protesta. Los manifestantes, en su mayoría jóvenes, marcharon por las calles de esta capital cantando consignas como "Eyadema devuélvenos nuestra victoria", "Queremos un cambio", y "Treinta y un años de poder es suficiente".
En un distrito, los manifestantes armaron barricadas e incendiaron neumáticos. La reacción de las fuerzas de seguridad fue rápida y rigurosa, y en cuatro días la Cruz Roja contó más de 60 heridos y un muerto.
La sede de partido de Olympio fue incendiada, y sus simpatizandes golpeados por fuerzas de la policía antidisturbios.
Informaciones de países vecinos a este pequeño estado africano se refirieron el domingo a la relativa calma y la reanudación de las actividades de los cuatro millones de habitantes.
Las protestas irrumpieron poco después que el ministro del Interior togolés, Seyi Memene, anunciara que Eyadema ganó las elecciones presidenciales con 52,13 por ciento de los votos contra 34,10 por ciento de su principal oponente, Olympio.
Los candidatos Yaovi Agboyibor, Zarifou Ayeva, Leopold Gnininvi y Jacques Amouzou obtuvieron 9,54 por ciento, 3,2 por ciento, 0,8 por ciento y 0,35 por ciento respectivamente, según el ministro.
La oposición rechazó de inmediato los resultados del gobierno, alegando falta de transparencia en el conteo electoral.
Edem Kodjo, presidente de la Unión Togolesa por la Democracia hizo un llamado a Eyadema a respetar el veredicto de los votantes.
Mientras, la Unión Europea y Estados Unidos exhortaron a los togolesses a evitar el uso de la violencia, y manifestaron preocupación ante la renuncia del director de la comisión electoral.
"La renuncia del director de la comisión electoral puso fin al funcionamiento del proceso electoral, y no puede garantizar el requisito de transparencia expuesto en los estatutos del código electoral", dijo Paolo Salvia, presidente de la misión de observación electoral de la UE a Togo.
La declaración sonó como una alarma al país de Africa Occidental, ya que la UE es uno de los principales donantes de Togo. (FIN/IPS/tra-en/hytb/nrn/mn/lp/ip/98
