La organización anticastrista Movimiento Democracia, radicada en Estados Unidos, realizó hoy una operación propagandística sorpresiva que pasó sin pena ni gloria en una costa del litoral norte de la capital de Cuba.
Funcionarios del Ministerio del Interior cerraron el acceso a una zona de la playa del Chivo, situada a escasos metros de la bahía de La Habana, donde podía observarse una balsa y un globo desinflados tirados sobre la tierra.
A solo unos metros de distancia, un globo gigante y multicolor, inflado para el rodaje de una película cubana acaparaba este lunes la atención de los curiosos y diluía totalmente el interés de los transeúntes.
"Allí se filma una película y aquí hay una situación que el MININT (Ministerio del Interior) está analizando", dijo un oficial que pidió a los corresponsales extranjeros que se movilizaron hasta el lugar no filmar más imágenes.
El Movimiento Democracia comunicó la noche del domingo que una balsa inflable, guiada por un piloto automático, y atada a un pequeño dirigible llegaría a las costas del Malecón habanero en las primeras horas de este lunes.
A diferencia de ocasiones anteriores, cuando el grupo ha acompañado sus acciones de amplias campañas propagandísticas en la prensa de Miami, el grupo mantuvo la acción en secreto hasta último momento.
El factor sorpresa pudo haber garantizado el arribo a tierra de la balsa, aunque al desviarse algo más de un kilómetro perdió su efecto propagandístico contra el gobierno de Fidel Castro.
Un testigo que pasó cerca de la playa del Chivo a las 7.30 de la mañana (11.30 GMT) dijo a IPS que vio desde el ómnibus donde viajaba un globo donde podía leerse la palabra "democracia".
"Alguien en la guagua (ómnibus) dijo que era una película que estaban filmando", aseguró.
El Movimiento Democracia pretendía que su envío llegara hasta algún área del Malecón, donde siempre se concentran gran cantidad de pescadores, transeúntes y vehículos en circulación.
Un comunicado enviado a la prensa indica que la balsa contendría asistencia humanitaria, como un ejercicio simbólico del derecho que le asiste al Movimiento Democracia de ayudar al pueblo cubano.
La balsa incluía una grabación preparada para reproducirse a una hora específica con la afirmación de que el grupo no reparará ni en leyes extranjeras ni en "la negación arrogante" del gobierno cubano para cumplir con su intención de llevar ayuda humanitaria a la isla.
"Esta última operación del Movimiento Democracia responde a una nueva táctica dentro de su estrategia no violenta de exigir el derecho de ayudar al pueblo cubano", afirma el comunicado firmado por el delegado nacional Ramón Saúl Sánchez.
Las incursiones del Movimiento Democracia y del grupo Hermanos al Rescate, también radicado en la ciudad de Miami, Estados Unidos, tuvieron su primer capítulo el 13 de julio de 1995 al cumplirse un año del hundimiento del remolcador 13 de Marzo.
Treinta y dos personas que intentaban emigrar ilegalmente a Estados Unidos desaparecieron a bordo del remolcador que naufragó en horas de la madrugada al chocar con una embarcación similar que lo perseguía.
"Somos los campeones de la paciencia, pero la paciencia se acaba", dijo el presidente Castro al reaccionar al reaccionar a la primera flotilla anticastrista, que estuvo integrada por varias embarcaciones, seis avionetas y dos helicopteros.
Una de las naves fue vista por numerosos cubanos cuando sobrevolaba el área costera de La Habana y, según un informe oficial, otras realizaron vuelos rasantes de forma provocadora sobre unidades navales de tropas guardafronteras.
Acciones similares, incluyendo la distribución aérea de volantes contra el gobierno de Castro, se sucedieron en 1995 hasta desencadenar la "crisis de las avionetas", el 24 de febrero de 1996.
Ese día las fuerzas aéreas cubanas derribaron dos avionetas civiles, tripuladas por pilotos de Hermanos al Rescate, incidente que acabó con un incipiente proceso de distensión entre La Habana y Washington.
El gobierno de Bill Clinton dio luz verde a la ley Helms-Burton que endurece el bloqueo contra Cuba, y, al mismo tiempo, anunció a los grupos anticastristas con base en territorio estadounidense que no permitiría misiones destinadas a violar las fronteras cubanas.
"Aunque el movimiento hubiera querido que el gobierno cubano diera la noticia primero, decidimos hacerlo nosotros mismos para evitar que el gobierno de Cuba distorsione el contenido de la balsa y su propósito no violento", afirmó el comunicado anticastrista. (FIN/IPS/da/mj/ip/98