Cuatro miembros del opositor Grupo de Trabajo de la Disidencia Interna cumplen hoy un año de prisión en Cuba sin haber sido llevados ante los tribunales y sin que se conozcan los cargos en su contra.
La liberación del también conocido como el Grupo de los Cuatro fue solicitada por el papa Juan Pablo II y por el primer ministro de Canadá, Jean Chrétien, sin que el gobierno de Fidel Castro dé un paso en ese sentido.
Martha Beatriz Roque, Vladimiro Roca, René Gómez y Félix Bonne fueron detenidos el 16 de julio del año pasado tras divulgar dentro y fuera de la isla un documento opositor al gobernante Partido Comunista (PCC).
"La Patria es de Todos" apareció en respuesta a la resolución política presentada al quinto congreso comunista, realizado en octubre, con el título "El Partido de la unidad, la democracia y los derechos humanos que defendemos".
El texto disidente puso en cuestión el apoyo popular al informe del PCC y exigió pluripartidismo, ausente en el régimen socialista cubano que reconoce al Partido Comunista como única opción política.
El vocero de la cancillería cubana, Alejandro González, ha reiterado durante meses, ante preguntas de la prensa extranjera acreditada en La Habana, que todas las personas detenidas en la isla guardan prisión porque "han violado la ley".
En Cuba está prohibido cualquier tipo de asociación o actividad que atente contra la estabilidad del Estado socialista y el papel del Partido Comunista como guía principal de la sociedad.
Fuentes de la oposición aseguran que los cuatro detenidos pueden ser acusados de "propaganda enemiga", uno de los delitos contrarrevolucionarios que comprenden penas de entre uno y quince años de prisión.
Lo particular en el caso del Grupo de los Cuatro, según esas fuentes, es que cumplen un año de prisión provisional sin que la Fiscalía presente cargos contra ellos ni fueran llevados a juicio.
"Queremos llamar la atención sobre nuestra situación y reclamar un juicio público, con la asistencia de la prensa extranjera y los diplomáticos acreditados que así lo deseen", afirmó uno de los detenidos este miércoles.
Roca, también presidente del ilegal Partido Socialdemócrata de Cuba, pidió un "proceso transparente y limpio", en una carta enviada a la prensa desde la cárcel de Ariza, en la provincial de Cienfuegos, a 336 kilómetros de La Habana.
Un comunicado de la Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional (CCDHRN) se lamentó de que "la Fiscalía ni siquiera ha formulado los cargos concretos por los cuales se les mantiene confinados en prisiones de alta seguridad".
El presidente del grupo opositor, Elizardo Sánchez Santa Cruz, exhortó a "las más altas autoridades de la República" a investigar las irregularidades ocurridas en este caso que, aseguró, violan lo establecido por la ley cubana de Procedimiento Penal.
Las autoridades deben "tomar en cuenta que se trata de cuatro intelectuales sin antecedentes penales, cuyas acciones contestatarias al parecer no van más allá del discutible e inquietante delito de opinión", dijo Sánchez.
Una lista parcial de presos cubanos por motivos políticos o político-sociales, presentada por Sánchez el día 7, incluyó 381 casos confirmados por familiares cercanos y otros 79 sobre los cuales no se tiene información actualizada.
El disidente aseguró que se observa en Cuba una tendencia positiva hacia el descenso del número de prisioneros políticos. Sin embargo, advirtió que la cifra aún es alta en un país "de poca violencia".
El gobierno de Castro respondió el 12 de febrero pasado a un pedido del Papa con un indulto a 299 prisioneros, 224 por razones humanitarias. Entre los liberados figuraban más de 90 opositores.
El diario oficial Granma afirmó entonces que unas 70 personas incluidas en la solicitud papal no serán liberadas "por razones de seguridad para el país, peligrosidad de los sancionados y gravedad de los delitos cometidos". (FIN/IPS/da/mj/hd ip/98