Rubén Blades, Los Fabulosos Cadillacs, Wiilie Colón, Los Pericos, Paralamas, Desorden Público y Aterciopelados estremecieron la capital de Venezuela con un concierto para promover los derechos humanos presenciado por 100.000 personas.
"Concierto en la Base" se denominó este pastiche de muy diferentes géneros, bandas, estilos e intérpretes, por igual aclamados con vítores y aplausos cuando intercalaron sus presentaciones con lecturas de artículos de la Declaración Universal de los Derechos Humanos.
El escenario del espectáculo, que duró 12 horas el domingo 19, fue el aeródromo La Carlota, enclavado en el este de Caracas y donde en lo que va de año se han efectuado tres de estos experimentos masivos que ya apuntan a convertirse en tendencia.
Lo auspició la cadena estadounidense de televisión por cable MTV en español, con respaldo de Amnistía Internacional. MTV transmitirá el 1 de agosto una edición de tres horas del concierto caraqueño, dirigido a su audiencia latinoamericana cifrada en 8,3 millones de personas.
Posteriormente, informó la televisora, transmitirá vídeos de músicos como Sean Lennon, Public Enemy, Bono, Beastie Boys, León Gieco, R.E.M. y The Valderramas, que, al igual que los artistas presentes en el Concierto en la Base, leerán artículos de la Declaración de Derechos Humanos.
"La violación de los derechos humanos es un problema de todo el mundo, y creemos que los jóvenes deben familiarizarse con el asunto", dijo el gerente de MTV, Enríque Pérez.
La televisora y Amnistía Internacional preparan la recolección de firmas a favor de los derechos humanos entre centenares de músicos, cantantes y otros artistas del hemisferio.
El legajo se entregará al secretario general de la Organización de las Naciones Unidas, Kofi Annan, el 10 de diciembre, Día de los Derechos Humanos, de cuya proclamación se cumple el cincuentenaro este año.
El Concierto en la Base mostró al grupo ganador del último festival venezolano de nuevas bandas, Wahala, a Un Solo Pueblo, veterana agrupación de rescate del folclore negro, y a Desorden Público, el más destacado grupo de ska del país.
Les sucedieron Aterciopelados, de Colombia, Los Fabulosos Cadillacs, de Argentina, y Paralamas, de Brasil. La euforia, al cabo de horas de calor apenas mitigado por compasivos chorros de agua esparcidos sobre la multitud de jóvenes, llegó con el grupo argentino Los Pericos.
Cada visita de esta banda a Venezuela se transforma en un éxito rotundo. Al cierre, descargaron sus canciones dos astros de la música que el Caribe impuso al continente, el panameño Rubén Blades y el puertorriqueño Willie Colón.
"La fórmula parece ser siempre la misma: un poquito de salsa, otro de merengue, y rock latinoamericano. Venezuela es un mercado que absorbe muchas tendencias, pero no en grandes cantidades", observó la comentarista del diario El Nacional, Karina Padilla.
Ya el productor brasileño Nico Gómez había advertido que "la tendencia en América Latina es organizar grandes festivales", y en el caso de Venezuela, sin grandes públicos para un solo género y escasez de dinero para abonar costosas entradas, los carteles deben ampliarse a una variedad de nombres y estilos.
Como otros festivales que abrazaron causas humanitarias, el Concierto en la Base, guiado por el conductor de MTV mexicano Arturo Hernández, esparció la consigna "Estos son tus derechos. Defiéndelos". (FIN/IPS/jz/mj/cr hd/98