La comisaria de la Unión Europea (UE), Ema Bonino, advirtió que la conferencia de las Naciones Unidas para crear un Tribunal Penal Internacional (TPI) que juzgue crímenes de guerra y violaciones de derechos humanos corre riesgo de fracasar.
Bonino, principal promotora de la conferencia, se mostró preocupada por el desarrollo de la reunión y formuló ante los periodistas un llamamiento a elevar la discusión a un nivel más político para evitar su fracaso.
Cuando faltan sólo cinco días para el fin previsto de la reunión, que comenzó el 15 de junio, la funcionaria reconoció que "existe riesgo de un fracaso".
"Ninguna cuestión tiene aún solución, a pesar que se encuentra al alcance de la mano", aseguró Bonino, comisaria de Ayuda Humanitaria de la UE.
América Latina ha tenido un papel constructivo en la conferencia de las Naciones Unidas que se celebra en la capital de Italia para crear el TPI, dijo Bonino.
La única excepción es México, que, sin embargo, ha modificado en parte su reticencia a la creación del tribunal, agregó Bonino. Otros países reticentes son Estados Unidos, India y los del mundo árabe, explicó.
Los problemas complicados, como la jurisdicción del tribunal, su relación con el Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y la determinación de la instancia decidirá el inicio de las investigaciones, "pueden ser resueltos con una actitud constructiva", sostuvo.
Se debe buscar "un acuerdo común entre los estados genuinamente interesados a establecer un instrumento de disuasión eficaz contra los crímenes futuros", dijo Bonino.
El problema "no es la ausencia de soluciones aceptables respecto de las legítimas preocupaciones de los participantes, sino más bien la reticencia a elevar el debate a un nivel más eminentemente político", agregó.
Más allá de las controversias jurídicas, "existen decisiones políticas, a las cuales se llega a través de un arbitraje político", dijo. "Hoy no veo ninguna excusa, ningún pretexto, para no concluir la conferencia el 17 de julio" con un acuerdo, añadió.
Bonino pidió en particular a Italia, país huésped de la conferencia que se realiza en la sede de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), a intensificar sus esfuerzos para que la reunión concluya con un éxito.
"Formulo un llamamiento al gobierno italiano a hacer uso de todos los instrumentos diplomáticos de los cuales dispone para favorecer un resultado positivo", declaró.
"Estoy segura de que el gobierno italiano actuará en estos últimos días de la conferencia con igual celo, la misma energía y los mismos recursos usados para establecer acuerdos internacionales en los sectores económicos y comerciales", dijo.
La funcionaria pidió también a la opinión pública que ejerza sobre las delegaciones una mayor presión para que se constituya el TPI.
El día 14 se realizará una manifestación en Roma, que concluirá frente a la FAO, convocada por el Partido Radical Transnacional al que pertenece Bonino y por la organización no gubernamental No Existe Paz sin Justicia.
Si el Tribunal existiera, debería intervenir de inmediato en Sierra Leona, donde los grupos rebeldes desarrollan una campaña de terror sin precedentes contra la población civil, dijo Bonino.
Las fuerzas rebeldes atacan desde abril a civiles inermes, incluso ancianos y niños, a los que sistemáticamente someten a amputaciones. (FIN/IPS/jp/mj/hd/98