La descontaminación de las bases militares que Estados Unidos debe devolver a Panamá en 1999 podría convertirse en un nuevo elemento de presión hacia este país centroamericano tras el fracaso de la negociación para constituir un Centro Multilateral Antidrogas (CMA) en el área del canal.
El Frente Panamá Soberano, organización no gubernamental que nuclea unos 45 grupos populares opuestos a la presencia militar de Estados Unidos, advirtió el miércoles pasado en un comunicado que, tras el fracaso del CMA, Washington aplicará "el torniquete" contra Panamá.
Advertencias similares fueron planteadas por el biólogo Carlos Arellano Lennox, el político independiente Miguel Antonio Bernal y la jefa del Departamento de Gestión Ambiental de la estatal Autoridad de la Región Interoceánica (ARI), Sayda Grimaldo.
La ARI está a cargo de administrar los bienes entregados por Estados Unidos a Panamá en virtud de los tratados canaleros.
Grimaldo integra una subcomisión especial constituida por el gobierno panameño para tratar el saneamiento de las bases militares y los polígonos de tiro con representantes del ejército de Estados Unidos.
La funcionaria señaló que el compromiso de sanear las bases y los polígonos de tiro asumido por Estados Unidos en los tratados canaleros de 1977 últimamente "se ha convertido en tema de discusión" entre los representantes de ambos países.
Mientras Panamá exige la discusión y análisis de un informe que debe hacer Washington sobre el estado de las bases y polígonos de tiro y las medidas que va a adoptar para sanearlas, como quedó acordado en los tratados, "Estados Unidos se circunscribe a un intercambio de documentos", denunció Grimaldo.
Arellano Lennox afirmó que unas 7.000 de las 17.000 hectáreas de tierras ocupadas por los polígonos y las bases militares "se encuentran identificadas" por el ejército de Estados Unidos "como áreas de impacto de alto riesgo".
El costo para descontaminar las bases y los polígonos de tiro localizados en las riberas del canal es de alrededor de 10.000 millones de dólares, indicó a IPS el ex presidente de Panamá, Jorge Illueca.
Arellano Lennox advirtió que hay otros lugares, además de las "áreas de impacto de alto riesgo", usados para experimentos y prácticas militares con municiones cargadas con uranio empobrecido. Es el caso del centro experimental de Piña, sobre el litoral Pacífico y a pocos kilómetros de la capital panameña.
"Nos dicen que estas áreas se utilizan para hacer experimentos en el trópico, pero no explican en que se basan esos experimentos ni si son peligrosos para la salud, como es el caso del uranio empobrecido", subrayó.
El experto expresó que, hasta ahora, Estados Unidos ha esgrimido pretextos y evasivas para cumplir con su obligación de sanear las bases y polígonos de tiro, y que el actual enfriamiento en las relaciones a causa del CMA puede reforzar esa posición.
El Frente Panamá Soberano indicó que, según la publicación estadounidense Inside the Pentagon (Dentro del Pentágono), el gobierno de Estados Unidos comenzó a aplicar la táctica "del amor duro" contra Panamá para obligar a las autoridades a cambiar su posición respecto del CMA.
La organización panameña tradujo al español y divulgó en Panamá el informe publicado hace pocos días en Estados Unidos por Inside the Pentagon.
La decisión del gobierno de Estados Unidos se habría tomado el 7 de julio tras una reunión del Consejo de Seguridad Nacional en la que se decidió congelar las negociaciones con Panamá y buscar alternativas para ubicar el CMA.
La embajada de Estados Unidos en Panamá indicó el 17 de julio en un comunicado que su país comenzó a buscar alternativas para constituir el CMA en otro país de la región debido al retroceso que sufrieron las negociaciones con Panamá.
Según Inside the Pentagon, Estados Unidos mantiene interés en constituir el CMA, pero bajo las condiciones que establecieron sus negociadores.
Entre esas condiciones figuran que sus militares asignados al CMA realicen desde allí "operaciones humanitarias y de salvamento" en otros países de la región, que tengan extraterritorialidad jurídica y que solo respondan órdenes de oficiales estadounidenses.
Un plazo de vigencia del acuerdo por 15 años, en lugar de los tres que propone Panamá, también formaba parte de la controvertida propuesta de Washington, que no fue aceptada por este país y que dio origen al congelamiento de las negociaciones.
Entre las áreas objeto del "amor duro" citado por Inside The Pentagon se encuentra "notificar a los vendedores panameños" que abastecen a las tropas estadounidenses que aún se mantienen en el área del canal "que Estados Unidos terminarán sus contratos".
Notificar al personal civil en Panamá que terminarán su empleo en el ejército, cesar todo entrenamiento de funcionarios panameños, el retiro de las unidades de prensa y la suspensión de la compra de productos panameños figuran también en el plan de "amor duro".
Una fuente del gobierno estadounidense que Inside The Pentagon no identificó por su nombre en el informe dijo que muchas de las acciones propuestas en ese plan "ya han sido tomadas por el Comando Sur" del ejército de Estados Unidos. responsable de las operaciones en este país. (FIN/IPS/sh/mj/ip en/98