Estados Unidos podría perder el derecho al voto en la Asamblea General de la ONU si no entrega antes de fin de año al menos 211 millones de dólares de los 1.300 millones que le debe al foro mundial.
Un informe de la Oficina General de Contabilidad (GAO), organismo del Congreso de Estados Unidos, reveló esta semana que Washington podría tener un atraso en el pago de la deuda suficiente como para perder el derecho a voto en enero de 1999, si no paga entre 211 y 244 millones de dólares al 31 de diciembre.
A Estados Unidos "le deseamos buena suerte", declaró el miércoles el subsecretario general Joseph Connor, ciudadano estadounidense, y director del Departamento de Administración de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
Dado que el dinero se retiene por razones políticas, Estados Unidos debe primero legislar el pago de la deuda y, tras la aprobación del Congreso, entregar los fondos a la Secretaría de la ONU antes de fin de año, explicó Connor a la prensa.
La deuda asciende a unos 1.300 millones de dólares por montos debidos desde hace años, pero Estados Unidos sólo tiene que pagar un máximo de 244 millones, además de lo que desembolsó este año, para mantener el derecho al voto en la ONU.
"Sería una gran vergüenza para Estados Unidos, y aumentaría la presión para reducir nuestra influencia en el Consejo de Seguridad y otros foros internacionales", escribió Princeton Lyman, secretario de Estado adjunto para asuntos de organizaciones internacionales, en una carta a la GAO.
El dinero es retenido por legisladores republicanos de derecha que pretenden una drástica reducción del gasto y de 50 por ciento del personal de la ONU.
El principal defensor de la reducción del gasto del foro mundial es el presidente del Comité de Relaciones Exteriores del Senado, Jesse Helms, quien dice que financiar a la ONU es "como arrojar dinero a una guarida de ratas".
El artículo 19 de la Carta de la ONU señala que un miembro que esté atrasado en el pago de sus aportes financieros no tendrá derecho al voto en la Asamblea General si la cantidad adeudada iguala o excede el monto de los aportes de los dos años previos.
Hasta principios de junio, 23 países eran deudores según las condiciones del artículo 19. Entre ellos se encuentran Yugoslavia, que debía 11,7 millones de dólares, Iraq (siete millones), Georgia (2,8 millones), Moldavia (1,7 millones) y Bosnia-Herzegovina (un millón).
Además, hay varios países como Burundi, Somalia, República Centroafricana y Congo, cuyos problemas políticos y económicos afectaron sus pagos a la ONU.
Pero el artículo 19 estipula que la Asamblea General tiene derecho a permitir el voto de un miembro deudor si el organismo considera que "la falta de pago se debe a condiciones fuera del control del miembro".
De esta manera, la Asamblea General votó el año pasado para eximir de la pérdida del voto a Comoras, Liberia y Tajikistán, informó Connor. Los tres países aseguraron que no podían pagar su deuda debido a problemas económicos
Cuando los estados se encuentran en condiciones de ser sancionados, la Secretaría les notifica por escrito y "con llamadas telefónicas", explicó Connor. A fines del año pasado, 39 países estaban por perder el derecho al voto, pero en unas semanas, 12 pagaron su deuda, señaló.
En su informe, la GAO señaló que, con anterioridad, estados miembros como Francia, la ex Unión Soviética y China pasaron por una situación similar al negarse a pagar ciertos aportes, pero aun así mantuvieron el derecho al voto.
En el caso de China, la Asamblea General autorizó a la ONU a colocar el monto debido en una cuenta especial, indicó el informe.
"Sin embargo, según funcionarios estadounidenses, hasta la fecha, Washington no tuvo éxito con sus gestiones para crear una cuenta de ese tipo por la cantidad en disputa", informó el GAO.
Según Washington, el país sólo le debe al foro mundial unos 800 millones de dólares, y no 1.300 millones. La diferencia de 500 millones se debe al pago que retiene Estados Unidos por las misiones de paz de la ONU.
El año pasado, Estados Unidos decidió en forma unilateral reducir sus aportes al presupuesto de misiones de paz de la ONU, de 31 por ciento a 25 por ciento del total. Washington también retuvo el dinero por razones políticas.
En una carta dirigida a la GAO, el Departamento de Estado declaró que, aunque los datos del informe son correctos, este tiene un enfoque limitado y no capturó el sentir de la ONU hacia Estados Unidos o la pérdida de influencia y prestigio causado por la deuda.
Aunque Washington es el mayor contribuyente al presupuesto de la ONU, con cerca de 25 por ciento del presupuesto anual de 1.300 millones, "el problema de la deuda se sumó al difícil ambiente en que tienen que operar el Departamento de Estado y la misión de Estados Unidos" en el foro mundial, sostuvo la GAO. (FIN/IPS/tra-en/td/mk/aq-lp/ip/98