El presidente de México, Ernesto Zedillo, justificó hoy las incursiones de la policía y el ejército en zonas de influencia de la guerrilla zapatista porque solo "puede haber paz con respeto a la ley".
"Por un tiempo muy corto la violación de la ley puede simular una forma de paz, pero más pronto que tarde la violación de la ley no da seguridad ni certidumbre", dijo Zedillo, a pesar de que grupos opositores advierten que su estrategia de fomentar la acción bélica reactivará la guerra.
Unos 2.000 policías y militares se enfrentaron el miércoles con bases de apoyo del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), en el estado de Chiapas, cuando los primeros llegaron a la comunidad de El Bosque para detener a personas acusadas de algunos delitos y desmantelar un municipio autónomo.
La acción, en la que murieron nueve indígenas, permitió que campesinos vinculados al gobernante Partido Revolucionario Insitucional reasuman la presidencia municipal del lugar, de la que habrían sido expulsados por seguidores de la guerrilla.
"Cada nivel de gobierno y cada autoridad tienen la obligación de hacer respetar la ley, tienen la obligación que se respeten los derechos de todos", expresó Zedillo durante la cuarta gira de trabajo realizada por comunidades de Chiapas desde inicios mayo.
El operativo en el El Bosque fue parte de una estrategia del gobierno, iniciada en enero, dirigida a desmantelar los más de 20 municipios autónomos creados por los seguidores de la guerrilla, que las autoridades consideran ilegales.
Los partidos políticos de oposición, grupos humanitarios y un sector de la Iglesia Católica sostienen que el gobierno busca reactivar la guerra, pues no respeta la tregua militar con la guerrilla, establecida por una ley dictada por el Congreso en 1995.
El centroizquierdista Partido de la Revolución Democrática amenazó este viernes con retirarse de cualquier mesa de negociación con el gobierno si continúa "la política de fuerza y exterminio de los pueblos indígenas que se aplica en Chiapas".
En tanto, algunos milicianos del EZLN se apostaron en zonas cercanas a la comunidad de El Bosque, para defender a los indígenas, según declararon.
"Ellos son los que quieren la guerra. Ya soportamos mucho. No podemos permitir que ataquen a la población civil", declaró a los periodista un miliciano que se identificó como Pedro.
Grupos humanitarios locales e internacionales, entre ellos Amnistía Internacional, demandaron frenar los ataques contra los campesinos, pues las acciones provocan mayor violencia y dificultan el reinicio de las negociaciones de paz con el EZLN, suspendidas desde 1996.
Pero Zedillo sostiene que "la violación de la ley no es una forma de paz".
"Permitir que se viole la ley puede parecer para algunos que es el precio que hay que pagar por la paz, eso es falso (…) la violación de la ley siempre acaba por provocar más violencia", enfatizó. (FIN/IPS/dc/mj/ip/98