La Comisión para la Defensa de los Derechos Humanos en Centroamérica (Codehuca) reiteró hoy su denuncia de falta de libertad sindical en el sector privado de Costa Rica.
Daniel Camacho, coordinador general de Codehuca, dijo que los trabajadores del área privada costarricense no pueden organizar sindicatos, porque si lo intentan son despedidos y, donde los hay, sufren atropellos.
Esta situación se presenta con mayor claridad en las empresas bananeras, según testimonios adjuntados por Camacho en una carta al presidente de la Unión Costarricense de Cámaras y Asociaciones de la Empresa Privada, quien esta semana había puesto en duda las denuncias.
Camacho hizo referencia a acusaciones contra empresas bananeras presentadas ante instancias nacionales e internacionales, donde se da cuenta de "atropellos" sufridos por trabajadores sindicalizados o por quienes "pretenden sindicalizarse en las plantaciones bananeras de la zona atlántica".
"Las empresas bananeras impulsan modelos de organización laboral que les permitan flexibilizar las relaciones laborales e, incluso, ir más allá: controlarlas. Al mismo tiempo, llevan a cabo una serie de prácticas desleales para impedir que los trabajadores se organicen en sindicatos", según los denunciantes.
En consecuencia, concluyeron los trabajadores, no existe libertad de organización sindical en las plantaciones y empacadoras de banano, a pesar del cúmulo de leyes nacionales e internacionales que así lo determina.
"Toda persona, sea hombre o mujer, que intente organizarse sindicalmente, o por el simple hecho de simpatizar con una organización sindical, automáticamente es despedido o se le hostiga para que renuncie del sindicato", aseguraron las organizaciones laborales.
Camacho indicó que los hechos señalados por los trabajadores bananeros se repiten en otros sectores de actividad.
"En algunas empresas, la sola mención de la idea de formar un sindicato es causal de inmediato despido", aseguró.
Organizaciones sociales de América Central hicieron a fines de mayo, en un foro regional realizado por Codehuca, un recuento de los principales problemas en materia de condiciones laborales.
El informe sobre la situación en Costa Rica fue el resultado de cinco talleres en el que participaron más de 20 organizaciones nacionales.
Según ese informe, además de los obstáculos para organizarse sindicalmente, los trabajadores sufren en Costa Rica discriminación por edad y sexo y deficientes condiciones de salud ocupacional, y la mano de obra de los inmigrantes es sobreexplotada.
También se indicó que los trabajadores se ven enfrentados a la inestabilidad laboral. De esta situación no escapan los niños, que son explotados laboralmente.
Los empresarios cuestionaron ese diagnóstico y sus representantes aseguraron que la situación de los trabajadores es mejor en Costa Rica que en otros países.
"Costa Rica es de los países en que los trabajadores están más protegidos y tienen mayores libertades, garantías económicas y sociales. Si hay algún problema es mínimo, comparado con otros países", afirmó el segundo vicepresidente de la Unión de Cámaras, Arnoldo Uribe.
En su período de mayor apogeo, en la década de los 70, el sindicalismo tuvo en Costa Rica una tasa de afiliación de 15 por ciento. (FIN/IPS/mso/ff/lb hd/98