El protagonismo alcanzado por las organizaciones guerrilleras en el último proceso electoral de Colombia se consolidó, pues el Ejército de Liberación Nacional (ELN) aceptó participar en el diálogo por la paz propuesto por el presidente electo Andrés Pastrana.
Los grupos rebeldes se ubicaron, también, como ganadores de las elecciones del domingo, porque "impusieron al presidente electo" la inclusión del diálogo entre sus prioridades, dijo a IPS Luis Valencia, de la facultad de Ciencias Políticas de la privada Universidad de los Andes.
"Que el presidente electo haya tenido que establecer como una de sus prioridades el diálogo con la guerrilla", se concrete o no, fue una jugada maestra de los rebeldes que pone en apuros al futuro mandatario, según el experto.
Para Valencia, "la correlación de fuerzas colocó a la guerrilla como la contraparte de la crisis política del país", al punto que el Pastrana "no se reúne con su contraparte para acordar cómo va a gobernar sino que anuncia como prioridad la reunión con la cúpula guerrillera".
El ELN, segunda fuerza guerrillera del país, anunció el jueves su disposición "a dialogar abiertamente" con Pastrana, lo cual se concretaría, en principio, por vía radio-telefónica con la cúpula clandestina de esa organización y luego con sus portavoces hoy encarcelados, Francisco Galán y Felipe Torres.
En la carta al presidente electo, el ELN señaló que la paz "solo es posible con justicia social, desarrollo, democracia, soberanía y libertad", y que se requiere un acompañamiento internacional que debe ser convenido entre el gobierno y la insurgencia.
El grupo insurgente advirtió, no obstante, que "ningún proceso de paz puede pretender de la insurgencia la rendición, el desarme, la desmovilización" ni que arríe sus "objetivos políticos".
El ELN reiteró además que para el éxito del proceso es necesaria "la extinción" de los grupos paramilitares de derecha, meta a la que consideró "responsabilidad exclusiva del Estado".
A esta posición se sumó el minoritario Ejército Popular de Liberación (EPL), anunció su máximo jefe, Francisco Caraballo, también detenido.
El ELN y el EPL, con las mayoritarias Fuerzas Armadas Revolucionarias (FARC), integran la Coordinadora Nacional Guerrillera Simón Bolivar (CNGB), que suma cerca de 20.000 combatientes.
El líder de las FARC, Manuel Marulanda, colocó la paz entre las prioridades de los candidatos al reunirse una semana antes de las elecciones con uno de los principales asesores de Pastrana.
A pesar de que las FARC anunciaron que no respaldaban a ningún aspirante a la presidencia, el contacto con Marulanda y un comunicado simultáneo en el que descalificaron al candidato del oficialista Partido Liberal, Horacio Serpa, ayudaron a la campaña de Pastrana, según analistas.
Tras ser electo, Pastrana anunció que su prioridad sería iniciar de inmediato contactos para entrevistarse con Marulanda y con la cúpula del ELN concretar en persona la apertura del diálogo.
Que Pastrana encabece directamente el proceso de acercamiento, en opinión del politólogo Alevo Vargas, vicerrector de la estatal Universidad Nacional "distiende las relaciones y crea confianza para el inicio del diálogo".
Alfredo Rangel, ex asesor de Samper en materia de de seguridad nacional, dijo que un coincidencia a ese nivel marca una "diferencia absoluta" respecto a lo que fue el manejo del fracasado proceso de paz del gobierno de Samper.
Samper delegó el desarrollo de su política de paz a sus consejeros y no pudo vencer la resistencia de las FARC y el ELN, que calificaron al gobierno de "ilegítimo" por haber recibido dinero del narcotráfico en la campaña electoral de 1994.
Pero la presión internacional y de la ciudadanía son otros factores que habrían influido en que la guerrilla, fortalecida económicamente y también por contar con numerosos efectivos, se incline por la negociación.
"La primera responsabilidad que tenemos es implementar toda la politica de paz" y "a partir de mañana (lunes) atenderemos el mandato de 10 millones de colombianos que el año pasado votaron en el Mandato Ciudadano por la Paz", dijo Pastrana apenas conoció su triunfo el domingo.
El Mandato Ciudadano por la Paz fue promovido por cerca de 30 organizaciones no gubernamentales que se pronunciaron contra la violencia en todas sus manifestaciones.
El presidente de Estados Unidos Bill Clinton envió este jueves a través de su embajada en Colombia un mensaje de felicitación aa Pastrana, en el que le ofrece sus buenos oficios en pro de la paz.
"Usted enfrentará grandes retos en su trabajo por preservar el estado de derecho", garantizar los derechos humanos, controlar la producción y tráfico de drogas "y poner fin al conflicto armado", afirma Clinton en su mensaje, en el que le afirma que espera "trabajar muy cerca de usted". (FIN/IPS/yf/mj/ip/98