Las organizaciones no gubernamentales (ONG) italianas que participan en una campaña internacional por la reforma del Banco Mundial pidieron a esa institución el bloqueo del financiamiento de un importante proyecto en Chad y Camerún.
Las ONG sostienen que el otorgamiento de los fondos debe estar supeditado al respeto de los derechos humanos y el ambiente en la zona meridional de Chad donde se realizarán obras para la extracción de petróleo y un oleoducto entre ese país y Camerún
Unas 30 asociaciones ambientalistas y ONG de promoción del desarrollo y de los derechos humanos forman parte de la campaña por la reforma de los mecanismos de control de los proyectos respaldados por el Banco Mundial en el mundo en desarrollo.
El coordinador de la campaña, Francesco Martone, declaró a IPS que las ONG solicitaron esta semana al Banco Mundial el bloqueo del aporte financiero anunciado para las obras en Chad y Camerún, promovidas por un consorcio internacional conformado por las multinacionales petroleras Esso, Shell y ELF Aquitaine.
El consejo de administración del banco aguarda las conclusiones de un estudio de impacto ambiental para pronunciarse sobre el proyecto, y el consorcio internacional ha declarado públicamente que no realizará las obras sin la participación del Banco Mundial.
La iniciativa prevé la explotación de 300 pozos de petróleo en la región de Doba, sur del Chad, y la construcción de un oleoducto de cerca 1.100 kilómetros a través de Camerún para llevar el crudo hasta la costa.
Los 300 pozos a abrirse producirán cerca de 225.000 barriles diarios de petróleo. Se prevé también la construcción de infraestructuras de bombeo y de un terminal flotante en el Océano Atlántico, cerca de la ciudad de Krini, en Camerún.
El costo total ascenderá a cerca de 3.500 millones de dólares, y el Banco Mundial considera participar con un crédito por 120 millones e inversiones por otros 250 millones de dólares.
Las ONG italianas advirtieron que la zona sureña de Chad ha sido teatro de violentos enfrentamientos entre el ejército y fuerzas rebeldes y que varios civiles fueron torturados por las tropas gubernamentales.
Agregaron que en ese país africano se han perpetrado graves violaciones de los derechos humanos desde octubre de 1997, con un episodio extremo en marzo de 1998, cuando cien civiles fueron asesinados en región de Logone.
También señalaron que el parlamentario oporitor Ngarledji Yorongar está encarcelado desde el 2 de junio de 1998, acusado de difamación.
Yorongar había criticado el proyecto de explotación de petróleo y construcción del oleducto y asegurado que el presidente Idriss Déby y altos funcionarios tuvieron actuación irregular en la concesión del proyecto.
Las ONG pidieron al Banco Mundial que presione al gobierno de Chad para que respete los derechos humanos y el estado de derecho y suspenda toda actividad militar en la región meridional.
Al respecto, indicaron que el Parlamento Europeo aprobó esta semana una resolución de urgencia contra las violaciones de los derechos humanos en Chad y que pidió la inmediata liberación de Yorongar y una serie de garantías para la continuación del proyecto petrolero.
El Parlamento Europeo solicitó la participación en la iniciativa de comunidades locales, una mayor transparencia, medidas adecuadas para la prevención de daños ambientales y el compromiso de distribuir parte de las ganancias en programas de desarrollo social.
El proyecto es también resistido por organizaciones de la sociedad civil de Estados Unidos, Francia y Holanda, que se movilizan junto a las ONG italianas.
Esa presión indujo en abril al Banco Mundial a renunciar a la utilización en el caso de recursos de la Asociación Internacional para el Desarrollo, que concede préstamos en condiciones favorables a naciones en desarrollo.
Las ONG advirtieron que no hay garantías de protección del ambiente ni de respeto de los intereses de las comunidades locales en el proyecto de las petroleras para Chad.
La iniciativa, señalaron, ha provocado dudas incluso en algunos gobiernos europeos, como el holandés, cuyo parlamento se pronunció en contra de su realización.
La comisión de Relaciones Exteriores del Senado de Italia aprobó esta semana una resolución por la cual exhorta al gobierno de Romano Prodi a solicitar la reforma de los mecanismos de control de los proyectos del Banco mundial y de la política que orienta el otorgamiento de ayuda para la lucha contra la pobreza. (FIN/IPS/jp/ff/hd en/98