Las autoridades de Brasil parecen decididas a poner fin al comercio ilegal en la frontera con Paraguay, que estaría generando pérdidas fiscales de 1.000 millones de dólares y tráfico de armas y de drogas.
Una intensificación de la represión fiscal desde fines de mayo produjo la aprehensión de más de 1.500 millones de dólares en mercancías y protestas de comerciantes paraguayos, con el bloqueo por varios días del Puente de la Amistad entre los dos países.
Ahora, la Secretaría de Renta Federal prepara un golpe mortal contra el contrabando desde Paraguay. Propondrá al gobierno que establezca un impuesto a la exportación de cigarrillos de 150 a 200 por ciento, adelantó el jueves pasado el analista Celso Pinto.
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