La noticia hoy de las pruebas nucleares de Pakistán coincidió con ataques de la oposición de India al gobernante Partido Bharatiya Janata (BJP), al que acusó de iniciar una carrera nuclear en el subcontinente.
La sesión parlamentaria sobre presupuesto se inauguró el miércoles en India y en ella tuvo lugar un intenso debate sobre las posibles consecuencias para el país de las cinco pruebas nucleares que realizó hace dos semanas y del programa armamentista de que forman parte.
Aunque el BJP realizó una intensa campaña para vincular su programa nuclear a razones de seguridad nacional, la oposición acusó al gobierno de inventar amenazas inexistentes para justificar sus pruebas atómicas.
Fue Natwar Singh, un diplomático de carrera y canciller bajo el gobierno del partido del Congreso, quien este jueves dio la noticia de los ensayos nucleares de Pakistán en la cámara baja del parlamento.
Somnath Chatterjee, líder del Partido Comunista, aprovechó la ocasión para acusar al gobierno de no ser consciente de lo que hace. "El país no está seguro en manos del BJP", advirtió.
Otros líderes opositores acusaron al gobierno de mantener al parlamento en ascuas, dado que minutos antes habían visto al primer ministro Atal Behari Vajpayee y al ministro del Interior, Lal Krishna Advani, abandonar la cámara apresuradamente.
Finalmente, Vajpayee retornó a la cámara para confirmar formalmente que Pakistán había realizado las pruebas y comentó que ahora los ensayos de India están justificados, lo que arrancó el aplauso de las bancas del gobierno.
Chatterjee y otros miembros de la oposición replicaron diciendo que lo que en realidad queda justificado es su propia advertencia de que el programa del gobierno desataría una carrera armamentista.
La cámara levantó la sesión luego de que Vajpayee anunció que se recabarían detalles sobre las explosiones de Pakistán y se presentarían en el parlamento este viernes, cuando se reanude el debate. Luego el primer ministro se reunió con el resto del gabinete.
Vajpayee admitió a los periodistas que lo esperaban a la salida del parlamento que, aunque los ensayos de Pakistán no lo sorprendieron, "crearon una nueva situación que ayudará a formular las opciones de India".
Vajpayee exhortó a sus compatriotas a permanecer unidos "para enfrentar cualquier riesgo" y declaró que el gobierno "está listo para hacer frente a cualquier desafío".
Las pruebas de Pakistán confirmaron los temores de India de que ese país poseía armas nucleares, dijo un portavoz oficial. "Ahora esperamos que aquellos que discrepaban con nosotros cambien de opinión", añadió.
Mientras, el jefe del ejército, general V.P. Malik, negó cualquier movimiento de tropas indias pero afirmó que se observaron algunos movimientos del otro lado de la frontera.
Malik sostuvo que no tiene órdenes de atacar a Pakistán y que toda la actividad militar se limita a operaciones de rutina para poner fin a la "guerra por poder" que, según India, Pakistán libra por la posesión de la parte india de la región musulmana de Cachemira.
Islamabad había acusado a Nueva Delhi este jueves, antes de las explosiones, de planear ataques a sus instalaciones nucleares, pero funcionarios indios calificaron las acusaciones como "propaganda malintencionada".
En un acuerdo firmado hace 10 años, ambos países se comprometieron a no atacar sus respectivas instalaciones nucleares.
Esta semana, el gobierno había advertido a Pakistán que debía reconocer "el cambio en la situación geopolítica" tras las exitosas pruebas de India y que no descartaba una persecución de los militantes paquistaníes que operan en el estado de Jamu y Cachemira.
Los ensayos nucleares de ambos países eliminan cualquier posibilidad de aproximación entre ellos, divididos en 1947 cuando los británicos salieron de India.
La creación de una nueva mayoría musulmana en Pakistán provocó el desplazamiento de unos 10 millones de personas y la muerte de otro medio millón en actos de violencia. Ambas partes aún guardan amargos recuerdos de la partición.
Las relaciones bilaterales siempre fueron difíciles y quedaron marcadas por tres sangrientas guerras, una de las cuales resultó en la creación de Bangladesh como estado independiente.
Pakistán continúa disputando la posesión de Jamu y Cachemira, el único estado de mayoría musulmana de India, un país predominantemente hindú pero constitucionalmente laico.
Durante el debate de este jueves en el parlamento, el ministro de Defensa de India, George Fernandes, señaló que todos los días mueren soldados indios en la frontera con Pakistán. (FIN/IPS/tra- en/rdr/an/ml/ip/98