El cantante italiano Andrea Bocelli triunfó en escenarios de México con un repertorio distinto al que le permite vender 15 millones de discos por año en todo el mundo y dejó la semilla de un intensa polémica entre los amantes de la ópera.
Para conocedores de la música culta o clásica, Bocelli, artista ciego que en menos de cuatro años alcanzó la fama gracias a "Romanza", su disco de baladas, no es un tenor como se proclama y sus éxitos son solo producto de la mercadotecnia.
Bocelli se presentó el lunes y el miércoles en el Auditorio Nacional de la capital mexicana ante unas 20.000 personas. Luego viajó al puerto de Veracruz para brindar un concierto en un antiguo fuerte militar.
La campaña publicitaria que precedió la visita del artista a México, anclada en la famosa canción "Por ti volaré", contrastó con las presentaciones, pues las baladas estuvieron ausentes del escenario.
Bocelli, de 39 años, optó por presentar en el país latinoamericano la mayoría de canciones de su nuevo disco, "Arias", en el que la ópera es el género predominante.
Sin ningún alarde tecnológico ni escénico, Bocelli, con una mínima expresión corporal, desplegó su potente voz acompañado de la orquesta sinfónica de la ciudad mexicana de Xalapa.
El público, que no paró de pedir en los intermedios canciones del disco "Romanza", quedó al parecer contento con sólo escuchar al final de los conciertos la canción "Por ti volaré", que hoy se difunde en todas partes del mundo y que en México ha vendido más de 600.000 copias.
Mientras Bocelli cante con micrófono y no se presente en un teatro de renombre internacional, no deberá ser considerado un cantante de ópera, señalan algunos críticos mexicanos.
"Ante todo, Bocelli es un fenómeno del 'marketing' y no ayuda en nada a acercar al público a la ópera. En realidad, es un cantante de música pop", señaló el crítico Luis Pérez.
El cantante italiano es un fenómeno de la música pop, género en el que "no tengo la menor referencia e interés, pues es un terreno del que me he mantenido ajeno por convicción", sostuvo, por su parte, el experto José Antonio Alcaraz.
"Yo no me considero nada. Dejo que los demás me consideren como quieran. Pero, por lo menos, espero que me consideren pop cuando canto canciones y cantante de ópera cuando canto arias, y no al contrario", declaró Bocelli al diario Reforma.
Según el cantante, las baladas y la música pop son un accidente en su carrera, pues lo que realmente le gusta es la ópera.
"Yo soy un típico tenor italiano y sí me presento en teatros donde canto sin micrófono", aseguró.
Ganador del Festival de San Remo en 1994, Bocelli indicó que desde el inicio de su carrera combatió el escepticismo de la gente, pues su condición de ciego "es una limitación muy seria", que en su caso le "ha hecho la vida sumamente difícil".
El artista quedó ciego a los 12 años, luego de sufrir un golpe en la cabeza mientras jugaba fútbol.
El escritor colombiano Alvaro Mutis, residente en México, expresó su admiración por Bocelli, pues considera que canta muy bien y tiene muy buen gusto para escoger su repertorio.
Por ser tan buen artista "no tiene remedio a ser un fenómeno de marketing, pues el mundo es un inmeso supermercado donde todo lo que sobresale entra a los anaqueles", dijo Mutis, ganador del Premio de las Letras Príncipe de Asturias 1997.
Doctor en derecho y pianista de bar, el artista logró destacarse en 1992, cuando el famoso cantante rockero italiano Zucchero lo invitó a interpretar algunas piezas.
Bocelli, a quien algunos comienzan a llamar el "tenor del nuevo milenio", ha llegado a ser tan famoso que su página en la red Internet, instalada en 1997, recibe decenas de personas por hora para conocer pormenores de la biografía del artista o participar en las conversaciones entre sus fanáticos.
En el sitio se pueden leer desde alagos al artista hasta severas críticas por cantar con amplificación y estar supuestamente sometido a los dictados del mercado. (FIN/IPS/dc/mj/cr/98