La prensa de Italia calificó hoy como una bofetada la negativa de la justicia de Estados Unidos a entregar a esta nación a una ciudadana italiana encarcelada por terrorismo para que pueda terminar de cumplir la pena en su propio país, como lo establecen las normas internacionales.
El Departamento de Justicia de Estados Unidos rechazó por quinta vez en siete años el traslado de Silvia Baraldini a una cárcel italiana.
El rechazo del Departamento de Justicia fue acompañado por un "no" a la concesión de libertad anticipada por buena conducta, que en cambio fue concedida a los compañeros "arrepentidos" de la ciudadana italiana.
Baraldini ya pasó 16 años en prisiones estadounidenses, luego de ser hallada culpable de participación en acciones terroristas.
La decisión cayó como una bofetada al gobierno italiano, que se había movido intensamente a todo nivel, incluso con la movilización del jefe de gobierno Romano Prodi y del vicepresidente Walter Veltroni, expresó hoy el diario La Repubblica, uno de los más influyentes del país.
La decisión fue comunicada mediante carta de la procuradora general de Estados Unidos, Janet Reno, al ministro de Justicia italiano, Giovanni Maria Flick.
"El gobierno italiano no nos ha dado suficientes garantías contra los riesgos de fuga de la condenada a prisión", dice la carta.
El nuevo "no" fue recibido con "personal desilusión" por el jefe del gobierno italiano, quien piensa dar "nuevos pasos para afrontar la situación".
Prodi recordó que "personal y constantemente" se había interesado en el caso de Silvia Baraldini, como también lo hicieron el presidente de la República, Oscar Luigi Scalfaro, y el ministro de Relaciones Exteriores, Lamberto Dini.
Aunque no lo anunció públicamente, se presume que Prodi planteará el tema en el encuentro que mantendrá con el presidente de Estados Unidos, Bill Clinton, en la Casa Blanca, durante una visita oficial del 5 al 8 de mayo.
Con el "último no, el caso Baraldini se transforma de un caso judicial en uno político y diplomático", comentó La Repubblica.
"Estados Unidos ha hecho un desaire a Italia, mostrando la misma arrogancia con la cual, a inicios de la semana, ajustició en Virginia al ciudadano paraguayo Angel Francisco Breard, violando la convención de Viena y la petición de suspensión del Tribunal de la Haya", agregó.
A esta actitud, afirmó el influyente periódico, "el gobierno sólo puede responder haciendo entender, en privado y en público, cuáles serán los daños para las relaciones italo- norteamericanas".
"Es inaceptable que Washington humille a Italia, en la persona del jefe del gobierno, sin pagar un precio", escribió el periódico.
Silvia Baraldini se encuentra en la cárcel de Danbury, en el estado de Connecticut. Fue condenada en 1984 a 43 años de reclusión por haber adherido al grupo revolucionario negro The Family y al Frente Armado por la Liberación de Puerto Rico.
Fue acusada de "actos terroristas" como la evasión de la revolucionaria negra Joaenne Chesimard y de numerosos robos, entre ellos uno, en el cual ella no habría participado, en que fueron asesinados dos policías.
La justicia norteamericana siempre subrayó que Baraldini "no colaboró en las investigaciones sobre el Frente", negándose incluso a hacer una "completa admisión de responsabilidad".
El ministro Flick, por su parte, expresó su "amargura y desconcierto", calificando como "poco comprensible" los argumentos estadounidenses de insuficiente colaboración de la detenida y su presunta participación en episodios de sangre, jamás probada.
De todos modos, Italia insistirá. "Renovaremos toda posible iniciativa, comenzando por el Consejo de Europa", manifestó Flick.
El gobierno espera un pronunciamiento del Consejo en junio sobre la aplicación del artículo 23 del Tratado de Estrasburgo acerca del traslado de los condenados.
El presidente del partido Refundación Comunista, Armando Cossuta, quien hace algunos meses fue a visitar a Baraldini, dijo que se trata de una "decisión gravísima".
Sugirió que si el rechazo se mantiene, "el gobierno debería advertir sobre "consecuencias importantes en las relaciones entre los dos países".
Mientras, el portavoz de los "Verdes", Luigi Manconi, invitó al gobierno a tomar todas las medidas necesarias para que Silvia Baraldini pueda cumplir en su país la condena de prisión.
Los Verdes forman parte del gobierno de centro-izquierda, mientras Refundación Comunista lo apoya, pero no lo integra. (FIN/IPS/tra-en/jp/ml/ip/98