El gobierno de Sierra Leona dio la orden de detener la minería extranjera de oro y diamantes en el país, como paso previo al anuncio de una nueva política nacional en el sector.
Una orden presidencial divulgada en la radio y televisión estatal durante el fin de semana se dirigió a empresarios extranjeros con licencias que dominan el sector minero desde hace 60 años. Los ciudadanos de Sierra Leona con licencias válidas están exentos.
Los siete distritos mineros de Sierra Leona, Kono, Kenema, Bo, Kailahun, Pujehun, Kambia y Moyamba, tienen enormes depósitos de oro, diamantes, hierro y bauxita.
"El gobierno no puede quedarse sin hacer nada mientras sus ciudadanos se ven privados de sus propios recursos, por lo tanto los nativos tendrán prioridad en el sector minero", destacó la declaración de la oficina del presidente Ahmed Tejan Kabbah.
Desde 1930, cuando se descubrieron los diamantes en Sierra Leona, hubo un gran influjo de extranjeros al sector. La minería es el segundo producto básico y la principal fuente de divisas.
En 1994, el sector contribuyó 16 por ciento al producto interno bruto (PIB) y 84 por ciento de las ganancias de las exportaciones. Analistas indican que el sector puede cubrir 55 por ciento de las divisas.
El experto en minerales Solomon Conteh sostuvo que el contrabando de diamantes y oro de parte de extranjeros con la ayuda de autoridades locales ha sido responsable del escaso rendimiento en el sector minero.
Conteh dijo que la medida del presidente podría llevar a la "indigenización de un área de actividad económica que ha estado fuera del alcance de los ciudadanos de Sierra Leona".
La orden presidencial advirtió que se tomarían estrictas medidas de seguridad contra quienes operen en el sector minero con documentos de ciudadanía obtenidos durante el gobierno de nueve meses del Consejo Revolucionario de las Fuerzas Armadas (AFRC), depuesto en febrero.
Lawrence Myers, de la Oficina de Oro y Diamantes del Gobierno (GGDO) dijo que el contrabando ha privado al pais de millones de dólares por año.
Medidas más estrictas en los distritos mineros y las regiones fronterizas producirían ingresos para el gobierno, carente de dinero, agregó. El presidente Kabbah declaró un estado de emergencia económica en el país. (FIN/IPS/tra-en/lf/pm/lp/if/98
