El ministro de Energía de Venezuela, Erwin Arrieta, dijo hoy que el país aceptaría rebajar en forma temporal su producción, si forma parte de un pacto general de exportadores de la OPEP e independientes para elevar los precios del petróleo.
Arrieta precisó que una rebaja temporal del bombeo de crudo no representaría una aceptación por parte de Venezuela del sistema de cuotas de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), que califica como inútil y anacrónico.
Se trata de un cambio radical de Venezuela, que desde que comenzó en enero la caída de los precios del petróleo había rechazado bajar su producción aunque fuera en un barril.
Cifras oficiales sitúan la producción en 3,4 millones de barriles diarios, cuando la cuota asignada por la OPEP es de 2,58 millones, en una admisión de rechazo a las cuotas del tercer exportador de la OPEP que favoreció el deslizamiento de precios.
Arrieta rechazó en forma catégorica que esté por realizarse antes del martes próximo una reunión ministerial de la OPEP y otros exportadores determinantes en el mercado, como Brunei, Egipto, México, Noruega y Omán, como aseguraron medios locales.
Aseguró que los ministros de la OPEP y de otros países exportadores mantienen "un continuo intercambio de ideas" por vía telefónica y que "se están puliendo conceptos y enfoques", en favor de medidas colectivas ante la crisis de precios.
Arrieta se mostró convencido que los contactos ministeriales van a cristalizar en "una solución definitiva que le ponga orden al mercado petrolero internacional y fortalezca y consolide los precios de una manera global a integral".
Precisó que el momento actual puede catalogarse como de "verificación de las posibilidades de lograr un frente común internacional" entre productores de la OPEP y extra OPEP.
El mercado petrolero soporta una sobreoferta debido al mayor bombeo de productores de la OPEP e independientes, mientras la demanda creció a menor ritmo del esperado por factores como la crisis asiática, el benigno invierno en el hemisferio norte, la venta de inventarios acumulados y movimientos especulativos.
Analistas independientes han indicado en Londres que el mercado está a la espera de una señal de los productores, que permita vislumbrar que la situación no seguirá en manos de los especuladores.
De no existir una acción decidida de la OPEP, los precios de los más importantes crudos marcadores del mercado podrían caer por debajo de los 10 dólares, pronosticó esta semana el Centro de Estudios Globales de Energía, con sede en la capital británica.
El barril de exportación venezolano se cotizó esta semana en 10 dólares, el rango más bajo desde la debacle de precios de 1986, mientras los principales crudos marcadores a nivel mundial lograron repuntar este miércoles ante algunas señales de mejoría en la relación entre Arabia Saudita y Venezuela.
Autoridades de Arabia Saudita, el mayor exportador mundial de petróleo, y Venezuela han intercambiado acusaciones sobre su sobreproducción y batalla por controlar mercados en que compiten directamente, como el estadounidense, lo que llegó a crispar la situación interna de la OPEP, en la que ambos participan.
Arrieta dio este miércoles por segura la realización de la reunión del Comité de Vigilancia de la OPEP el día 30, después que debió aplazarse su prevista fecha del lunes, ante la falta de consenso interno sobre sus objetivos.
El ministro venezolano afirmó que esa reunión va a producir un análisis determinante de todos los elementos que convergen para la volatilidad del mercado petrolero.
Arrieta dejó abierta la posibilidad de que el encuentro del comité de cuatro miembros pueda transformarse en una conferencia ministerial extraordinaria en la que participen los 11 socios de la OPEP, con capacidad para tomar decisiones.
Pero indicó que sería extraordiario que para entonces haya una voluntad unánime en ese sentido.
El ministro insistió en que la OPEP es una organización de gran valor para todos sus miembros, pero que tiene que pasar a cubrir una nueva agenda y dejar de limitarse a tratar de controlar el mercado mediante el sistema de cuotas.
Reiteró que la OPEP sólo contribuye con 38 por ciento de la producción petrolera mundial, de 74 millones de barriles diarios, por lo que no tiene capacidad aislada de conducir el mercado.
La OPEP, según diferentes mediciones de la oferta, produce cerca de un millón de barriles por encima del tope de 27,5 millones que se autoasignó durante la última conferencia ministerial, realizada en noviembre en Yakarta. (FIN/IPS/eg/ag/if/98