La Corte Suprema de Justicia de Paraguay despejó hoy otro obstáculo a la candidatura a la Presidencia de Lino Oviedo, al confirmar la validez de los comicios internos del gobernante Partido Colorado, que dieron el triunfo a ese general retirado.
Las elecciones internas fueron impugnadas por el sector de Luis María Argaña, presidente del Partido Colorado y derrotado en esa instancia por Oviedo. El grupo de Argaña creyó ver irregularidades en las actas de votación.
El fallo de la Corte Suprema de Justicia, por cinco votos contra cuatro, sigue a la decisión del Tribunal Superior de Justicia Electoral de avalar el resultado de las internas del Partido Colorado y, en consecuencia, admitir la candidatura de Oviedo a las elecciones del 10 de mayo.
Pero la misma Corte Suprema de Justicia debe pronunciarse todavía sobre la sentencia de un tribunal militar extraordinario que condenó a Oviedo a 10 años de cárcel, al hallarlo culpable de rebelarse contra el gobierno en abril de 1996.
Oviedo, que está detenido desde diciembre, quedaría inhabilitado como aspirante a la Presidencia si la Corte Suprema confirmara la sentencia del tribunal militar. El fallo se conocerá probablemente la próxima semana.
Si la decisión es contraria a la primera sentencia, ya no habrá ningún impedimento para que Oviedo sea el candidato del Partido Colorado, ya que la fórmula que encabeza fue inscripta de forma oficial en la justicia electoral.
El presidente de la Corte Suprema de Justicia, Raúl Sapena, votó a favor de la posición de Oviedo. Sapena debería hacerse cargo de la Presidencia paraguaya, de quedar vacante ese puesto.
Los líderes de los principales partidos políticos discuten con la mediación de la Iglesia Católica la propuesta colorada de postergación de las elecciones.
El ministro del Interior, Jorge Garcete, no descartó que el presidente Juan Carlos Wasmosy gobierne sin parlamento entre el 30 de junio, cuando concluya el mandato del Poder Legislativo, y el 15 de agosto, si no hubiera autoridades legítimas elegidas.
Si Sapena accede a la Presidencia, habrá "una dictadura de hecho", dijo Garcete. Sin nombrar a Sapena, el ministro sostuvo que cualquier juez que se haga cargo del gobierno tendrá un "poder omnímodo" y que esa posibilidad supondrá un "caos jurídico".
Por lo tanto, Garcete exhortó al Poder Judicial a acelerar el trámite de los juicios pendientes contra Oviedo "para estar en condiciones de hacer los comicios y tener autoridades legítimas".
Pero Oviedo podría intervenir en las elecciones aun si la convención colorada convocada para el 26 de abril optara por la abstención, según el presidente del Tribunal Superior de Justicia Electoral, Carlos Mojoli.
La convención no tiene autoridad para forzar la renuncia del candidato colorado, que ya inscribió su fórmula.
Mojoli sostuvo que cada candidato debería renunciar de forma individual, si esa fuera su intención, pues una decisión del Partido Colorado no supone la inhabilitación de los aspirantes ya inscriptos. (FIN/IPS/ct/ff-mj/ip/98
