Puertorriqueños de Chicago acusan a la Oficina Federal de Investigaciones (FBI) de Estados Unidos de caza de brujas y conspiración derechista por atribuir a un profesor universitario un atentado contra una dependencia militar.
El Centro Cultural de Puerto Rico (CCPR) en Chicago denunció que los 200.000 residentes en la ciudad originarios de la isla son objeto de caza de brujas, y que la persecución contra José Solís se desató después de que este catedrático se negara a trabajar como informante del FBI.
Solís, profesor de la Universidad de Puerto Rico, fue acusado de la detonación de una bomba en la oficina de reclutamiento del ejército en Chicago en 1992. El FBI dijo que pertenece al Frente Revolucionario Boricua (FRB), organización nacionalista que se responsabilizó por el atentado.
El CCPR desacreditó como "agente provocador" al principal testigo de la acusación, Rafael Marrero.
La paradoja es que, de acuerdo con la documentación del FBI, fue Marrero quien fundó el FRB y quien realizó el atentado de 1992. Tanto el FBI como Marrero aseguran que Solís solo colaboró en esa operación.
Marrero estudió en la Universidad de Puerto Rico en los años 80. En esa época fue miembro del Frente Antielectoral, coalición de grupos nacionalistas y marxistas. Según personas que militaron en ese grupo, Marrero se dedicaba a generar divisiones y conflictos internos en la organización.
El testigo se mudó en 1989 a Chicago, capital del estado de Illinois, donde se integró a grupos comunitarios y consiguió trabajo con el CCPR. Fuentes de la organización aseguran que asumió entonces posiciones sectarias de izquierda y trató de convencer a sus compañeros de realizar actos terroristas.
En 1995, Marrero abandonó el CCPR y comenzó a publicar El Pito, una publicación que realizaba intensos ataques al director del CCPR, José López, al congresista estadounidense de origen puertorriqueño Luis Gutiérrez y al movimiento independentista de Puerto Rico.
El Pito se distribuía gratuitamente en Chicago y no contenía publicidad. Su financiamiento era una incógnita.
Marrero también es pieza clave en una investigación sobre el CCPR que realiza el gobierno del estado de Illinois. El comité investigador está encabezado por el parlamentario de Illinois Edgar López, quien se opone al movimiento independentista de Puerto Rico.
López no es puertorriqueño, pero es un aliado del derechista Partido Nuevo Progresista, que apoya la conversión de Puerto Rico en un estado más de Estados Unidos.
El comité investiga si el CCPR utiliza fondos aportados por el estado de Illinois para financiar una campaña de prensa por la libertad de 15 puertorriqueños confinados en cárceles de Estados Unidos por razones políticas.
Todos estos presos cumplen condenas largas y algunos han estado en la cárcel durante décadas. Se los acusa de pertenecer a organizaciones clandestinas que optaron por la lucha armada para lograr la independencia de Puerto Rico de los Estados Unidos.
La investigación que se realiza en Illinois comenzó luego de que el diario Chicago Sun Times informó que "fondos escolares son utilizados para ayudar a terroristas".
En una serie de artículos, el diario aseguró que los alumnos de la escuela "Roberto Clemente", dirigida por el CCPR, eran adoctrinados con ideales nacionalistas de Puerto Rico, y que algunos de los maestros formaban parte de las Fuerzas Armadas de Liberación Nacional (FALN).
Cinco personas murieron y docenas resultaron heridas en una serie de atentados con bombas entre 1974 y 1980, atribuidos a las FALN. Pero esa organización no ha realizado ninguna actividad desde 1980, cuando varios de sus miembros fueron arrestados en Evanston, cerca de Chicago.
La principal fuente de los artículos publicados por el Chicago Sun Times fue Rafael Marrero.
"El diario ha llegado hasta extremos siniestros en su intento por criminalizar a la comunidad puertorriqueña", afirmó el profesor universitario Mervin Méndez, uno de los dirigentes de la campaña para que se levanten los cargos contra Solís.
El CCPR, que agrupo a organizaciones comunitarias, fue fundado en 1973. Hoy dirige escuelas alternativas, un centro de atención a portadores de virus de inmunodeficiencia humana, un parque y el museo de historia de Puerto Rico.
La organización tuvo un papel protagónico en la campaña por la apertura de un corredor de tiendas de puertorriqueños en pleno centro de Chicago, conocido como el Paseo Boricua.
Dirigentes del CCPR aseguran que la comunidad puertorriqueña fue objeto de agresiones por parte del FBI en el marco del programa de contrainteligencia conocido como Cointelpro.
Este programa fue clausurado en 1970 después que fuera expuesto por diversas fuentes como una fachada para tratar de eliminar las discrepancias políticas en Estados Unidos.
Según un memorándum de 1960 firmado por el jefe fundador del FBI Edgar Hoover, el movimiento independentista de Puerto Rico era el objetivo número dos del Cointelpro.
Chicago fue escenario de algunas de las peores escenas de violencia en los años 60.
En diciembre de 1969, el FBI y la policía de la ciudad atacaron la sede local de los Panteras Negras, un movimiento negro de orientación marxista. En esta operación militar murió el entonces líder de los Panteras, Freddie Hampton.
En 1983, el FBI lanzó un allanamiento contra la escuela puertorriqueña "Albizu Campos", en busca de contactos de las FALN. Según informes de la época los agentes no encontraron sospechosos, pero causaron daños por 25.000 dólares. (FIN/IPS/tra- en/cr/cb/lc-mj/ip/98