La Iglesia Católica hizo un público acto de contrición por no haberse opuesto de modo más firme y decidido a la matanza de judíos de Europa perpetrada por los nazis durante la segunda guerra mundial.
Diez años exigió la elaboración de un documento oficial del Vaticano, de poco más de diez páginas y titulado "Nosotros recordamos: Una reflexión sobre el Shoah" (holocausto), que fue dado a conocer el lunes en conferencia de prensa.
El holocausto judío fue "una increíble tragedia, que no podrá jamás ser olvidada", advirtió el Vaticano.
El informe divulgado "es más que un acto de arrepentimiento", puntualizó el cardenal australiano Edward Idris Cassidy, aunque el pedido expreso de perdón por las debilidades de la Iglesia ante el holocausto no figura en el texto.
Cassidy es presidente del Pontificio Consejo para la Promoción de la Unidad de los Cristianos y de la Comisión para las Relaciones con el Judaísmo, los dos grupos redactores del documento.
El Papa Juan Pablo II señaló en la introducción del informe que "el crimen que ha llegado a ser conocido como Shoah" es "una imborrable mancha en la historia del siglo que se está concluyendo".
También manifestó su esperanza en que el acto de contrición de la Iglesia Católica "ayude verdaderamente a curar las heridas de las incomprensiones e injusticias del pasado".
El arrepentimiento público de la Iglesia, calificado de histórico por los observadores, podría abrir camino al viaje que el Papa desea realizar a Israel.
El informe destaca que no todos los cristianos eludieron la responsabilidad a que los obligaban los Evangelios ante ila masacre de judíos.
En efecto, afirma hubo también entre ellos actos de heroísmo y absuelve y destaca la actitud del Papa Pío XII. Los judíos aseguran que Pío XII cerró los ojos ante el holocausto.
"En las tierras donde el nazismo realizó las deportaciones de masas, la brutalidad que acompañó esos movimientos forzados de gente inerme habría debido suscitar la sospecha de lo peor".
"¿Ofrecieron los cristianos toda posible asistencia a los perseguidos, y en particular a los hebreos?", se pregunta en el documento del Vaticano. "Muchos lo hicieron, pero otros no", es la respuesta del informe, dirigido a los fieles católicos de todo el mundo.
"Aquellos que ayudaron a salvar a todos los judíos que les fue posible, hasta el punto de poner su vida en peligro mortal, no deben ser olvidados", se agregó.
"Durante y después de la guerra, comunidades y personalidades hebreas expresaron su gratitud por lo que hecho por ellas", y ese reconocimiento alcanzó también a Pío XII, "por lo que hizo personalmente o a través de sus representantes para salvar centenares de miles de vidas" de judíos.
El documento cita testimonios "no solicitados" de "hijos del pueblo hebreo" que agradecen a Pío XII la ayuda dada a los judíos. Esos testimonios fueron publicadas en 1945 por L' Osservatore Romano, el diario del estado del Vaticano.
De Pío XII se "ha hablado negativamente, pero la historia debe ser escrita con objetividad, buscando la verdad", manifestó Cassidy.
Personalmente "no expreso juicio" sobre la actuación de Pío XII, dijo el cardenal. Agregó que ignora si se formalizará la beatificación de ese Papa.
Israel rindió honores por su actuación ante la matanza de judíos a muchos obispos, sacerdotes, religiosos y laicos católicos, se indicó en el documento.
"Sin embargo, como el Papa Juan Pablo II lo ha reconocido, junto a estos valientes hombres y mujeres, la resistencia espiritual y la acción concreta de otros cristianos no fue la que se podría haber esperado de discípulos de Cristo".
"Deploramos profundamente los errores y las culpas de estos hijos e hijas de la Iglesia", se afirmó. El documento también pidió "a nuestros amigos hebreos" abrir su corazón "para escuchar nuestra voz".
El Vaticano señaló que, en un princiio, el Tercer Reich alemán se propuso expulsar a los judíos, "pero desgraciadamente, los gobiernos de algunos países occidentales de tradición cristiana, incluso algunos de Norte y Sudamérica, fueron más que vacilantes" a la hora de "abrir sus fronteras a los hebreos perseguidos".
Al respecto, Cassidy sólo identificó a Estados Unidos y Gran Bretaña.
El Vaticano exhortó a resistir "toda forma de racismo y de exterminio, incluso en los días presentes", y recordó "a los millones de víctimas de la ideología totalitaria en la Unión Soviética, en China, Camboya y en otras partes", y pidió no olvidar el "drama del Medio Oriente".
Cassidy explicó que el documento, anunciado hace diez años, sólo se completó ahora pues "se decidió esperar a los episcopados alemán, polaco, holandés y francés, entre otros, que habían anunciado sus reflexiones".
"La Iglesia católica debe excusarse no sólo ante los judíos, sino frente a todas las víctimas del holocausto, incluidos los homosexuales", comentó Franco Grillini, presidente de Arcigay, el principal movimiento de homosexuales italianos. (FIN/IPS/jp/ff/hd/98