La ONU apeló hoy a la comunidad internacional simultáneamente en cuatro ciudades del mundo, solicitando más de 100 millones de dólares para brindar asistencia de emergencia a cuatro millones de víctimas de la guerra y la sequía en Sudán.
En una declaración de prensa presentada en esta capital, Nairobi, Ginebra y Nueva York, la Oficina para la Coordinación de Asuntos Humanitarios dijo que la mortal combinación de la guerra y la sequía amenaza desplazar a cientos de miles de sudaneses y dejar a comunidades enteras en riesgo de hambruna y enfermedades.
Unos 109,4 millones de dólares son necesarios "para satisfacer urgentes necesidades humanitarias de más de cuatro millones de sudaneses afectados", aseguró la declaración.
El dinero también sería utilizado para proyectos destinados a proteger estilos de vida, y, en el mediano plazo, reestablecer comunidades y redes sociales, agregó.
El grueso de la asistencia de emergencia a Sudán es canalizada a través de la Operación Línea de Vida Sudán (OLS), un consorcio de agencias de la ONU y organizaciones no gubernamentales (ONG) lanzado en 1988 después que más de 300.000 sudaneses murieran de hambre.
La OLS brinda asistencia humanitaria a personas afectadas por la guerra en el sur y el oeste de Sudán, y en campamentos para los desplazados cerca de las grandes ciudades.
La guerra de Sudán se concentra en el sur del país, donde los habitantes son mayoritariamente cristianos y seguidores de religiones tradicionales africanas, mientras el norte es árabe y musulmán. Las luchas comenzaron en 1983, em busca de la autodeterminación para el sur.
Según la ONU, cuatro millones de personas necesitarán asistencia para hacer frente los efectos de la guerra y el desplazamiento, la desnutrición y las enfermedades causadas por falta de atención médica, agua potable, malas condiciones sanitarias y refugio inadecuado.
El Programa Mundial de Alimentos (PMA), según la declaración, necesita 59,4 millones de dólares para comida y transporte, incluyendo traslados aéreos a áreas remotas.
El PMA estima que 75.530 toneladas métricas de alimentos de emergencia se requerirán en 1998 para 2,4 millones de sudaneses, en especial mujeres, niños y ancianos.
El Fondo de la ONU para la Infancia (UNICEF) pide 33,6 millones de dólares para medicinas y atención médica esenciales, refugios de emergencia, educación básica, semillas, herramientas y equipos de pesca. La agencia colaborará con la Organización para la Agricultura y la Alimentación (FAO) y la Organización Mundial de la Salud (OMS).
El S.O.S. también incluye el pedido de fondos adicionales para las operaciones en Sudán del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), y los programas del foro para el desarrollo (PNUD) y la población (FNUAP).
ACNUR pide 9,8 millones de dólares para asistencia multisectorial a 135.739 refugiados, el PNUD necesita 2,5 millones para preparación y respuesta a desastres en el oeste de Sudán, y el FNUAP 1,2 millones para servicios de salud reproductiva para mujeres y niños desplazados.
Durante 1997, la ONU sólo recibió 40 por ciento de los 120,8 millones de dólares que solicitó para actividades de emergencia en Sudán, lo cual perjudicó sus operaciones.
Por ejemplo, la frágil sitaución alimentaria en el país empeoró la nutrición de mujeres y niños, haciéndolos vulnerables a enfermedades con riesgo de muerte, pero UNICEF tuvo que reducir su intervención en la alimentación, la atención de la salud, el agua y el saneamiento por falta de fondos, dijo la declaración. (FIN/IPS/tra-en/nb/kb/lp/dv pr/98