El periodista y antropólogo ecuatoriano José Luis Goyes, recibió hoy el premio Rey de España por su reportaje televisivo "Las brujas de Calhuasig", que muestra con crudeza la existencia de dos culturas distantes destinadas a convivir.
Goyes es el primer ecuatoriano en recibir el galardón, uno de los más importantes en Iberoamérica.
"Estoy seguro de que no seré el último, pues en Ecuador existe un gran nivel periodístico que solamente requiere un impulso y decisión para hacerse presente en otros países", comentó a IPS.
"Las brujas de Calhuasig" había obtenido anteriormente el premio Asotab, el mayor de Ecuador, otorgado por la industria tabacalera de este país andino.
En este reportaje, realizado en julio de 1996, se muestra con imágenes estremecedoras el ajusticiamiento de dos hermanas practicantes de hechicería, acusadas de estafar a una comunidad quichua.
Según diversos testimonios las hermanas cobraban unos 200 dólares por "limpia" (rito de purificación), pero se presentaron varios casos de muertes entre las personas de la comunidad.
Las autoridades indígenas de Calhuasig, comunidad de unos 5.000 habitantes situada a 4.300 metros de altura, en la provincia de Tungurahua, resolvieron imponer un castigo ejemplar a las dos hermanas y expulsarlas de la comunidad.
Tungurahua es una de las provincias de mayor presencia indígena de Ecuador y se ubica en el llamado callejón interandino, 140 kilómetros al sur de Quito.
Ante la presencia de unos 3.000 indígenas, autoridades civiles, policiales y militares, las dos hermanas fueron desnudadas y azotadas en la plaza pública de Calhuasig.
"En una primera impresión el hecho fue calificado como un acto de barbarie por la mayoría de los ecuatorianos, pero yo sabía que esto era mucho más que eso, que ahí había un problema de dos formas de entender la justicia y de asumirla, es decir, de dos culturas opuestas", apuntó Goyes.
El reportaje pudo "caer en el sensacionalismo con facilidad", pues las imágenes "eran muy fuertes", o pudo haber asumido una posición moralista frente a los acontecimientos, "pero me limité a describir e interpretar lo que sucedía desde una perspectiva más lejana", comentó.
En el trabajo "no se cuestiona la decisión de la comunidad, sino que se analiza todo el contexto y uno llega a la conclusión inevitable de que a nuestra justicia no está hecha para los indígenas", declaró.
En Ecuador, la obra de Goyes desató un debate sobre la decadencia del sistema judicial que incluso llegó al parlamento,
"Sé bien que si hubiese decidido no trasmitir este reportaje las cosas hubieran sido muy diferentes. pero es aquí donde el trabajo de uno cobra sentido", destacó el autor. (FIN/IPS/mg/dg/cr/98


