El embargo que el gobierno de Estados Unidos aplicaría al camarón de Ecuador es un problema más para el sector pesquero de este país, que mantiene conflictos con la Unión Europea (UE) y enfrenta las consecuencias del fenómeno del Niño.
Esta semana una misión técnica del Departamento de Estado de Estados Unidos iniciará una inspección a la flota camaronera de Ecuador, para verificar el buen uso del dispositivo excluidor de tortugas, conocido como "ted" por sus iniciales en inglés.
En el sector pesquero existe temor ante un posible embargo, pues Quito ya ha recibido sanciones de este tipo por el mal uso del dispositivo.
"Además de los problemas que enfrentamos por el fenómeno del Niño ahora tenemos que preocuparnos por los conflictos externos", comentó Efraín Alvarado, de la Asociación de Atuneros del Ecuador (Atunec).
Actualmente la Comisión Económica de la UE estudia la aplicación de sanciones comerciales hacia el atún enlatado de Ecuador, a raíz de una demanda presentada por España.
Las autoridades españolas solicitaron un arancel de 24 por ciento al atún ecuatoriano de conserva, al considerar que las exportaciones de este país habían superado la cuota establecida en el Sistema Generalizado de Preferencias Andinas (SGPA).
El SGPA, vigente hasta 1999, es un mecanismo de apoyo para los países que integran la Comunidad Andina (Colombia, Bolivia, Ecuador, Perú y Venezuela) por sus esfuerzos en la lucha contra el narcotráfico.
Si bien tanto el atún enlatado como el camarón de captura no representan la producción más importante de Ecuador, "en estos momentos cualquier sanción hacia el sector pesquero podría ser nefasta", ya que el fenómeno del Niño ha reducido la capacidad de producción en 45 por ciento, dijo Alvarado.
Desde 1996 todos los países productores de camarón que exportan a Estados Unidos están obligados a utilizar el "ted", que evita la captura involuntaria de los quelonios, según disposiciones de la Corte de Comercio estadounidense.
Ecuador es el segundo productor de camarón a nivel mundial, luego de Tailandia. Esta actividad representa la tercera fuente de ingresos del país, después del petróleo y el banano.
En mayo de 1997 el camarón ecuatoriano fue objeto de un embargo, pues Washington encontró que el "ted" era utilizado incorrectamente por 40 por ciento de la flota de arrastre.
La sanción duró sólo un mes, ya que Quito solicitó un plazo de un año para la capacitación de los pescadores, al argumentar que 95 por ciento de las embarcaciones camaroneras tenían instalado el dispositivo.
Unicamente 10 por ciento de la producción de camarón proviene de la captura. El resto se obtiene en piscinas de cultivo.
Sin embargo, todo el camarón capturado se exporta a Estados Unidos y de esta actividad dependen unas 30.000 familias, según Carlos Carreira, presidente de la Flota Camaronera de Arrastre.
"Si ahora existe un embargo no podremos hacer mayor cosa, aunque confiamos en que esto no sucederá", declaró Nancy Celi, subsecretaria de Recursos Pesqueros de Ecuador.
Según Celi, "la flota ecuatoriana ha hecho todo lo posible por implementar el uso del dispositivo en este año".
Sobre el conflicto con la UE, Celi señaló que el viernes último el gobierno de Ecuador presentó sus argumentaciones a la Comisión Económica. "Estamos a la espera de los resultados", agregó.
Del total de exportaciones ecuatorianas de atún a España, 20 por ciento fueron en conservas y el resto en lomos..
Los argumentos de Ecuador se basan "en el crecimiento de la demanda de atún enlatado en España, que produjo un incremento de 2.000 toneladas en las exportaciones hacia ese país", aclaró Celli. (FIN/IPS/mg/dg/if/98