El diario Barricada, el mayor símbolo político del sandinismo, no salió a la calle hoy en Nicaragua después de circular ininterrumpidamente por 19 años, desde el triunfo de la rebelión contra el dictador Anastasio Somoza.
El director de Barricada, el ex ministro del Interior Tomás Borge, solicitó el viernes al Ministerio de Trabajo autorización para el "cierre temporal" de la publicación.
"Nuestro cierre temporal es amargo", afirmó Borge, quien asumió la conducción del periódico en octubre de 1994, em reemplazo de Carlos Fernando Chamorro, destituido por el Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) por razones políticas.
"Volveremos a la lucha, con un atractivo diseño, con una efectiva red de distribución, y con una eficaz maquinaria administrativa", aseguró Borge, fundador del FSLN.
No obstante, no indicó fecha de reaparición de Barricada. Mientras, los periodistas y otros trabajadores tomaron las instalaciones del diario y amenazaron con embargar los bienes del periódico y del director.
También comenzaron una campaña pública a través de las radios afines al sandinismo, solicitando el apoyo y la solidaridad de los simpatizantes del FSLN y de la población en general.
La dirección de Barricada adeuda al personal del diario los salarios de dos meses y medio. La deuda suma más de 150.000 dólares, una cantidad que se debía pagar este sábado. El cierre temporal autorizado por el Ministerio de Trabajo posterga ese compromiso.
Extraoficialmente se asegura que Barricada adeuda más de 500.000 dólares a sus proveedores de insumos.
Borge responsabilizó de las dificultades financieras del diario al gobierno del derechista Arnoldo Alemán, que durante más un año negó publicidad oficial a Barricada.
También ha acusado al sector privado de "complicidad" con el ahogo publicitario gubernamental. El Consejo Superior de la Empresa Privada exhortó en abril a sus afiliados a no publicar anuncios comerciales en "medios de comunicación de franca tendencia izquierdista".
Las denuncias de Borge fueron respaldadas por el Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (CENIDH), en su "Informe Anual 1997: Nicaragua y Derechos Humanos", divulgado la semana pasada.
De acuerdo con el CENIDH, la campaña de bloqueo publicitario tuvo graves efectos sobre los medios de comunicación sandinistas e independientes, ya que el Estado es fuente de 35 por ciento de la publicidad nacional.
La falta de publicida oficial y la decisión de los empresarios contribuyeron al cierre definitivo en 1997 de 60 programas de noticias en emisoras de radio y a la suspensión temporal de 20, con el consiguiente aumento del desempleo entre los periodistas, observó el CENIDH.
El cierre temporal de Barricada causó alarma entre los periodistas nicaragüenses.
"Es un aviso de que los medios de comunicación están en agonía", comentó Alan Téfel Alba, propietario del consorcio radial "Radio cadena de Oro", que agrupa a tres emisoras.
"Nos quieren ahogar, nos están asfixiando. Los anuncios (publicitarios) que conseguimos no cubren la loca carrera de (precios de) la energía, ni del agua", dijo Téfel Alba.
"La Constitución establece la libertad de información, pero no se está cumpliendo con ese precepto", agregó.
Barricada vendía en promedio 17.000 ejemplares diarios en octubre de 1994, cuando el FSLN resolvió destituir a Chamorro, al que acusó de simpatizar con un grupo disidente. Meses después fueron despedidos unos 20 periodistas.
A mediados de 1997 la venta cayó a 5.000 ejemplares diarios y la cantidad de suscriptores se redujo de 4.025 en agosto de 1994 a 2.553 en agosto de 1996, de acuerdo con un informe interno.
La cartera de publicidad se redujo 47 por ciento desde el periodo abril-junio de 1996 hasta el mismo trimestre de 1997.
Borge confirmó a IPS meses atrás que, para enfrentar la crisis, la administración del diario vendería las instalaciones del diario a inversionistas extranjeros, y que cedería otros bienes a sus acreedores estatales.
Asimismo, anunció la venta de acciones a sectores sociales ligados al sandinismo. Pero esa estrategia aún no ha dado resultados, y el personal del diario, compuesto por 275 trabajadores, está ahora transitoriamente sin empleo. (FIN/IPS/rf/ff/ip cr/98