El presidente de Ecuador, Fabián Alarcón, anunció hoy que el gobierno estudia la aplicación de un impuesto especial para enfrentar los efectos del fenómeno del Niño, que ya ha cobrado 60 víctimas en todo el país.
"Hasta el momento el gobierno ha podido dar auxilio rápido y oportuno a las provincias de la costa y de la sierra más afectadas por el fenómeno, pero tal vez sea necesario pedir a la población que se solidarice", comentó Alarcón.
Los créditos internacionales que se han solicitado para obras de infraestructura y de asistencia a la población "aún no llegan aunque algunos ya fueron aprobados", dijo Luis Reyna, coordinador de la Defensa Civil de la provincia costera de Esmeraldas.
La Corporación Andina de Fomento aprobó este jueves un préstamo de 25 millones de dólares, para financiar obras y atender emergencias, "pero los recursos podrían llegar en los últimos días del mes", arguyó Reyna.
Esmeraldas, 318 kilómetros al noroeste de Quito, es una de las provincias más afectadas por el Niño. Según Reyna, de las 3.000 personas que han sido evacuadas, 1.160 son de esta localidad.
Un impuesto especial "es una forma rápida de obtener recursos sin endeudamiento y dadas las consecuencias, sería nuestra única opción", continuó Reyna.
Según las autoridades gubernamentales, el impuesto sería similar al que se aplicó durante la guerra no declarada con Perú, en 1995, donde se gravó la tenencia de vehículos.
El Fenómeno del Niño es una corriente de agua cálida proveniente del Pacífico sur que se presenta con menor o mayor intensidad todos los años, por lo general en diciembre.
Este año, el fenómeno se adelantó unos meses y llegó con mayor intensidad, debido a variaciones de la corriente de Humbolt, de baja temperatura, y a la acción de los vientos alisios en el Pacífico ecuatorial.
Los efectos de este fenómeno se han hecho sentir en todo el mundo. En países de Asia, Africa y Europa, el Niño ha provocado períodos de lluvias intensas o de sequías.
"Pero los verdaderos efectos se empezarán a sentir a inicios de 1998", estimó el ministro de Agricultura de Ecuador, Alfredo Saltos,.
"Es evidente que habrá una subida mundial en el precio de los alimentos", dijo Saltos, pues "existen países que han perdido gran parte de sus cosechas por el fenómeno y hasta ahora no se puede cuantificar con exactitud la magnitud del problema".
En Ecuador, las cosechas de banano, cacao, café y arroz han sido las más perjudicadas por las lluvias.
Según estimaciones oficiales, este año las pérdidas por el fenómeno del Niño ascenderán a 100 millones de dólares, debido a la pérdida de productos agrícolas y pesqueros, lo que significa una reducción de 0,5 por ciento del producto interno bruto. (FIN/IPS/mg/ag/en-pr/97