El origen de la enfermedad que en pocas semanas ha causado más de 250 muertes en Kenia y Somalia permanece en el más absoluto misterio, aunque la Organización Mundial de la Salud (OMS) anunció hoy que no representa peligro alguno para los turistas.
La institución internacional basó su afirmación en el hecho de que el extraño mal se expandió por remotas zonas rurales de las fronteras entre los dos países del Cuerno de Africa, distantes de las rutas tradicionales del turismo.
David Heymann, director de la División de Enfermedades Emergentes y otras Transmisibles de la OMS, dijo que el foco del mal se ubica en la región nororiental de Kenia, limítrofe con Somalia pero alejada de los centros turísticos en Nairobi, Mombassa y los parques nacionales.
Al comienzo, la OMS descartó la posibilidad de que se trate de un brote del virus de Ebola, una de las enfermedades más letales conocidas, que ha aparecido de forma esporádica en Gabón y en la República Democrática de Congo.
En cambio, la OMS sugirió que el origen del mal puede encontrarse en el bacilo de antrax o en otros agentes infecciosos como la fiebre amarilla o la fiebre del Valle del Rift.
La OMS, en colaboración con las autoridades sanitarias kenianas y con organizaciones no gubernamentales, desplegaron equipos de investigación en las zonas afectadas.
Otro grupo de investigadores se encuentra en Somalia, al sur de Mogadiscio, donde se sospecha que apareció un segundo brote de la enfermedad hasta ahora no identificada.
La OMS admitió este martes en Ginebra que se desconoce la dimensión real del brote debido a las dificultades de acceso a esas áreas.
Sin embargo, los informes recibidos indicaron que el número de personas fallecidas por la enfermedad supera las 250. Una semana atrás se barajaba en Nairobi una cifra de 171 víctimas.
El parte de la OMS consignó que una enfermedad parecida se registró entre animales domésticos de la zona y causó muertes de cabras, ovejas, bovinos y camellos.
Los datos epidemiológicos procedentes de Kenia no respaldan el diagnóstico de la fiebre hemorrágica de Ebola como causa de la epidemia, insistió la OMS.
La naturaleza de la enfermedad se está investigando en laboratorios de Africa y Estados Unidos pertenecientes a centros que colaboran con la OMS.
Los centros que participan son el Instituto de Investigación Médica de Kenia (KEMRI), los Centros para Prevención y Control de las Enfermedades (CDC) de Estados Unidos y el Instituto Nacional de Virología de Sudáfrica.
Los tres agentes infecciosos a los que se atribuye la causa probable del brote (el bacilo de antrax, la fiebre amarilla y la fiebre del Valle del Rift) son endémicos en la zona afectada por la nueva y misteriosa enfermedad.
La OMS anticipó que posteriores informaciones sobre el proceso infeccioso serán divulgadas a medida que se conozcan los resultados de las pruebas en los laboratorios. (FIN/IPS/pc/mj/he/97
