Las posibilidades de expandir el Consejo de Seguridad de la ONU, de 15 países, sumando a Alemania, Japón y tres países en desarrollo como nuevos miembros permanentes decrecen, en medio de disputas por procedimientos y divisiones regionales.
El actual período de la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) sólo tiene un mes más, y quienes favorecen y rechazan la expansión del Consejo admiten que hay pocas esperanzas de que haya una votación para admitir nuevos miembros.
El grupo de 20 países que favorece la expansión intenta lograr respaldo para nuevos cinco miembros permanentes, Alemania, Japón y representantes de Africa, América Latina y Asia en un Consejo de unas 24 naciones.
Sin embargo, el embajador de Alemania, Tono Eitel, admitió esta semana en una discusión auspiciada por la Friederich Ebert Foundation que no se logró aún "una resolución marco" a ser sometida a votación de la Asamblea General.
Eitel destacó que la reforma del Consejo, al igual que cualquier reforma en la ONU, "es extremadamente difícil", y pronosticó que tendrá 50 por ciento de posibilidades tal como está planteada la situación.
Por otro lado, el embajador Paolo Fulci, de Italia, uno de los 23 co-auspiciantes de un borrador de resolución que pide a la Asamblea posponer la cuestión de la expansió hasta el próximo período de la Asamblea, cree que por el momento no hay resolución posible.
La mayoría de los países miembros de la ONU, dijo Fulci, no pueden ponerse de acuerdo sobre nuevos escaños permanentes, debido a rivalidades regionales.
"¿Imaginan por un momento que Pakistán o Indonesia aceptarían a India como miembro permanente, o Argentina y México a Brasil?", preguntó Fulci. Los actuales miembros permanentes del Consejo son China, Estados Unidos, Francia, Gran Bretaña y Rusia.
Entre los 23 coauspiciantes de la propuesta de postergación se encuentran Pakistán, Indonesia, Argentina y México, así como Corea del Sur, crítica de los planes de Japón por obtener un escaño permanente.
También figuran Italia, que se ha opuesto a la inclusión de Alemania, y otras potencias regionales como Egipto y Turquía, que tienen pocas posibilidades de lograr escaños permanentes.
Fulci dijo que el bloque contra la expansión no buscará el voto de su resolución siempre y cuando el bloque expansionista no procure el voto de una resolución marco.
Pero si hay algún intento de obtener aprobación para la expansión del Consejo en la Asamblea, agregó el enviado italiano, la resolución para retrasar la acción aún estára disponible. "No habrá un golpe", aseguró.
Mientras, no hay una respuesta clara sobre si los nuevos miembros permanentes tendrán los mismos poderes de veto que los cinco actuales. El Consejo tiene también 10 miembros no permanentes, que cumplen términos de dos años y carecen de poder de veto.
La reforma del Consejo podría retrasarse también por factores políticos externos, entre ellos, el no pago de Estados Unidos de unos 1.500 millones de dólares a la ONU.
El plan estadounidense de agregar cinco miembros permanentes sin que el Consejo tenga más de 21 miembros en total es sólo uno de muchos planes de reforma amenazado por la crisis de la deuda promovida por el no pago de Estados Unidos.
Tras el rechazo del Congreso de Estados Unidos la semana pasada de un plan desarrollado por la Casa Blanca para entregar al menos 850 millones de dólares, la Unión Europea deploró esta semana la falta de pago de Washington.
"No creo que esta decisión facilite las negociaciones de acciones aquí", dijo el secretario general de la ONU, Kofi Annan, después que el Congreso decidiera no incluir el pago en su presupuesto de ayuda exterior. (FIN/IPS/tra-en/fah/lp/ip/97
