El gobierno de la provincia de Gauteng, Sudáfrica, aprobó la despenalización de la prostitución, por lo cual las trabajadoras sexuales pueden obtener un permiso para trabajar en libertad.
Las mujeres que trabajan en las calles de Hillbrow, el distrito de Johannesburgo notorio por su prostitución, ahora pueden ganarse la vida como trabajadoras sexuales sin temor a que las policía las detenga por violar la ley.
La resolución que aprobó esta semana Gauteng, donde se halla Pretoria, la capital administrativa del país, impide que las prostitutas sean detenidas por su trabajo, les permite denunciar abusos como violaciones sexuales y las habilita para recibir beneficios laborales.
"Aunque se reconoce que el trabajo sexual o la prostitución genera objeciones morales para muchas personas, deben protegerse los derechos constitucionales de las trabajadoras sexuales a la dignidad, la intimidad y la libertad de asociación", declaró el viernes la Comisión de Derechos Humanos de Sudáfrica (SAHRC).
Gauteng aprobó las propuestas de un grupo de trabajo formado por el gobierno. Una de las recomendaciones estipulaba la protección de la ley para las prostitutas. Se calcula que sólo en Johannesburgo unas 10.000 personas viven del ejercicio de la prostitución.
"Existe el consenso entre las organizaciones no gubernamentales (ONG) de Gauteng de que debemos comenzar a hablar sobre la despenalización de la prostitución", dijo el ministro provincial de Seguridad, Jesse Duarte.
Duarte encargó el informe que el gobierno y varias ONG elaboraron durante varios meses. El mismo se presentó ante el gobierno nacional donde, se espera, ayudará a modificar la Ley de Delitos Sexuales de 1957, que ilegalizó la prostitución en el país.
Sólo el gobierno nacional tiene la facultad de cambiar dicha ley. La declaración de la SAHRC recomienda que el parlamento revoque los castigos penales que contiene la Ley de Delitos Sexuales, con la excepción del delito de proxenetismo.
La SAHRC estima que la despenalización del trabajo sexual creará un ambiente que dé paso a la educación y otras medidas de prevención para detener la diseminación del sida (síndrome de inmunodeficiencia adquirida).
Cerca de 2,5 millones de personas, en la población sudafricana de casi 38 millones, son portadoras de VIH (virus de inmunodeficiencia humana), que provoca el sida. Las autoridades de salud pública advierten que la cifra podría duplicarse en los próximos dos años.
Las gestiones para despenalizar la prostitución devuelven la dignidad humana a las trabajadoras sexuales, señaló la presidenta de la Comisión sobre Igualdad de Género, Thenjiwe Mtinso.
La nueva constitución de Sudáfrica incluye derechos individuales y establece que nadie será discriminado por su raza, sexo, género, origen étnico o social, orientación sexual, conciencia o creencia. También protege la dignidad del individuo.
"La vida sería mucho más fácil si pudiéramos tener los mismos beneficios laborales que los demás trabajadores", dijo Laura, trabajadora sexual de Hillbrow. La despenalización "ayudará a eliminar el estigma que está relacionado con nuestra profesión y alejará a los policías".
"Con frecuencia, la policía nos lleva sin ninguna razón en especial. Nos amenazan con procesarnos si no les brindamos favores sexuales", aseguró.
"Algunas de mis amigas fueron violadas por clientes, otras recibieron disparos, y como el trabajo sexual es ilegal, tuvieron miedo de hacer la denuncia", añadió Laura.
La despenalización impulsará las iniciativas para educar a las trabajadoras sexuales sobre temas de salud, cómo lidiar psicológicamente con una profesión de alto riesgo y alentará las prácticas sexuales seguras para reducir el nivel de enfermedades de transmisión sexual.
"La cuestión de la estigmatización de las trabajadoras sexuales como grupo de riesgo está basada más en cuestiones morales que en los hechos", afirmó Spiwe Takura, del Centro para el Estudio de la Violencia y la Reconciliación.
"Una sociedad basada en el temor utiliza chivos expiatorios para asegurar su supervivencia y seguridad", añadió.
"La percepción de que las trabajadoras sexuales son portadoras y diseminadoras de enfermedades de transmisión sexual es un ejemplo. Se dice que el VIH, en especial, es un problema de las trabajadoras sexuales", comentó Takura.
La intención del gobierno es fomentar la salud de las trabajadoras sexuales, declaró Sylvester Rakgoadi, vicedirector de Seguridad de Gauteng.
Algunas de las medidas que tomará el gobierno provincial incluyen brindar acceso a las trabajadoras sexuales a servicios adecuados de salud y supervisar su trabajo de acuerdo con las normas actuales.
Simultáneamente, el gobierno trabajará para combatir la prostitución infantil y la explotación de las mujeres por redes de proxenetas, señaló Rakgoadi. (FIN/IPS/tra-en/gm/pm/aq/pr/97