El insurgente Ejército de Liberación Nacional de Colombia (ELN) liberó hoy a los observadores de la Organización de Estados Americanos (OEA) que había secuestrado y reiteró su propuesta de convocar una convención nacional que busque soluciones al conflicto armado.
Los delegados de la OEA para las elecciones del pasado 26 de octubre Manfredo Marroquín, de Guatemala, Raúl Martínez, de Chile, y Juan Ardila, de Colombia, fueron entregados a una comisión especial en la localidad de Santa Ana, área selvática del departamento de Antioquia (noroeste).
Los secuestrados fueron liberados por un rebelde identificado como "comandante Oscar", del frente Carlos Alirio Buitrago, ante el consejero para la Paz, José Noé Ríos, la canciller María Ema Mejía, el coordinador de la misión de observadores de la OEA, Santiago Murray, y otras 17 personalidades.
El jefe guerrillero describió el secuestro de Marroquín, Martínez y Ardila como "un hecho de fuerza", pero agregó que los observadores de la OEA pudieron conocer durante su cautiverio el pensamiento del ELN y denunciar el papel "no neutral con el conflicto colombiano" del organismo interamericano.
La OEA envió la misión de 36 observadores a las elecciones locales del domingo 26 por pedido del gobierno de Ernesto Samper, ante los anuncios de la guerrilla y los grupos paramilitares de que boicotearían los comicios en las regiones donde tienen influencia.
El comandante Oscar afirmó que la retención les sirvió para exponer ante la comisión de personalidades y más de 60 periodistas nacionales e internacionales su propuesta de incluir a la sociedad civil en la búsqueda de soluciones al conflicto a través de una convención nacional.
El ELN quiere "un diálogo con los diversos sectores de la nación" porque "el proceso guerrilla-gobierno se ha agotado", agregó.
La "convención nacional" propuesta por el ELN y la convocatoria de una "asamblea contituyente" por parte de las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FARC) son las últimas iniciativas de la guerrilla para una solución negociada al conflicto.
Al mismo tiempo, el gobierno de Samper promueve la formación de "un grupo de países amigos" que apoyen la búsqueda de un acuerdo de paz con la guerrilla.
Samper se encontrará la próxima semana entrante en la venezolana Isla Margarita con sus pares de Costa Rica, España, México y Venezuela, durante la VII Cumbre Iberoamericana. Los cuatro países se ofrecieron en septiembre a respaldar un proceso en tal sentido.
Nicolás Rodríguez, de la cúpula del ELN, sostuvo que se han presentado numerosas propuestas de paz "que no conducen a nada" porque responden a propósitos particulares, tanto de partidos como de otros grupos.
Rodríguez declaró a la emisora Radionet que una propuesta auténtica de paz debe "involucrar a todo el mundo, incluyendo al gobierno".
Esta afirmación representa un cambio de posición en el ELN, que, que al igual que las FARC, el principal grupo rebelde del país, había desestimado la posibilidad de iniciar un diálogo con el gobierno de Samper.
El ministro de la defensa, Gilberto Echeverry, manifestó este sábado que la liberación de los observadores de la OEA y del funcionario colombiano por parte del ELN "debe servir como punto de reflexión de la guerrilla" a partir del cual "construir definitivamente la paz en Colombia".
Con el masivo voto por las paz que 10 millones de colombianos depositaron el día 26, "la guerrilla ha recibido una notificación". "Si la sabe manejar, será un elemento de engrandecimiento", sostuvo Echeverry.
Mientras transcurrían las elecciones de gobernadores, alcaldes, diputados y concejales, se cumplió en Colombia la convocatoria del "Mandato Ciudadano por la Paz", en el que se condenó la violencia y se reclamó a los antagonistas del conflicto armado que buscaran una salida negociada.
Para algunos analistas, la liberación de los retenidos, que el ELN calificó como un gesto humanitario, representa algunos avances que sugieren la posibilidad de acercamientos.
El cese del fuego que se acordó para la entrega de los secuestrados es, en opinión de Luis Valencia, de la privada Universidad de Los Andes, una muestra de confianza que no se había dado antes.
Sin embargo, lo que quedó claro para otros analistas fue que la liberación se cumplió según los términos del ELN, que propuso el cese de operaciones militares en la zona y mantuvo en secreto el sitio donde se produciría hasta último momento. (FIN/IPS/yf/mj/hd ip/97
