Los presidentes Ermnesto Samper, de Colombia, y Fernando Enrique Cardozo, de Brasil, firmaron hoy en la norteña ciudad de Cartagena acuerdos comerciales y de cooperación que buscan cerrar la frontera al narcotráfico.
La ministra de Relaciones Exteriores de Colombia, María Ema Mejía, destacó el acuerdo de cooperación para combatir "el tráfico de aeronaves comprometidas en actividades ilícitas transnacionales".
La cooperación se extenderá también para impedir a lo largo de los 1.645 kilómetros de frontera común el desvío a Colombia de precursores y sustancias químicas para el procesamiento de drogas.
Los dos acuerdos se inmarcan dentro de la política exterior desarrollada por Colombia en los últimos 18 meses, con el fin de "darle más herramientas a los jueces de los países vinculantes, en la lucha contra el narcotráfico", dijo Mejía.
Brasilia y Bogotá coinciden en que los narcotraficantes aprovechan la extensa frontera común para sacar la droga que se procesa en Colombia a través de pistas clandestinas.
En el campo comercial, los acuerdos buscan ampliar el intercambio bilateral actual de 600 millones de dólares.
El consejero presidencial para asuntos internacionales de Colombia, José María de Guzmán, indicó que se busca intensificar el precario intercambio bilateral, especialmente con la siderurgia brasileña y el carbón colombiano.
El embajador de Brasil en Colombia, Synesio Sampayo, dijo que esto cuenta con un marco favorable porque hay empresarios brasileños muy interesados en montar una planta siderúrgica en la costa caribeña de Colombia.
Samper y Cardozo viajarán este viernes a la isla venezolana de Margarita para asistir a la VII Cumbre Iberoamericana, en la que el presidente colombiano busca promover la constitución de un grupo de países amigos que apoyen un proceso de paz en su país. (FIN/IPS/yf/ag/ip-if/97
