Al cumplirse 20 años de la creación de Abuelas de Plaza de Mayo -la asociación argentina que busca a niños robados por la dictadura militar-, sus líderes se reunirán el miércoles con el papa Juan Pablo II para pedirle que interceda por aquellos menores que siguen ignorando su verdadera identidad.
La presidenta y la vicepresidenta de la asociación, Estela Carloto y Rosa Rosinblit, se entrevistarán por primera vez con el papa para que su voz llegue a quienes adoptaron niños secuestrados por represores ilegales, o nacidos bajo el cautiverio de sus padres durante el régimen militar (1976-83).
En diálogo con IPS, el secretario de la agrupación Abel Madariaga consideró que la aceptación de la audiencia por parte del pontífice implica "un reconocimiento a la labor que realizan las abuelas desde hace 20 años", cuando se abrieron de las Madres de Plaza de Mayo.
Hace menos de un mes, las abuelas habían conseguido captar la atención de Hillary Clinton, esposa del presidente de Estados Unidos Bill Clinton, quien les concedió una audiencia en Buenos Aires durante su gira por América del Sur y se conmovió con el relato que le hicieron sobre sus hijos y nietos.
Las abuelas también son madres de desaparecidos, pero se abocaron a la tarea de buscar a sus nietos, unos 300 niños secuestrados junto a sus padres, o nacidos en cárceles clandestinas, de los cuales ya encontraron a 57.
La mayoría estaba vivendo con miembros de fuerzas de seguridad y hoy tienen entre 17 y 25 años.
Desde hace 20 años, los grupos humanitarios de Argentina reclaman por unos 30.000 desaparecidos, aunque estimaciones oficiales recogen denuncias por 11.000.
Pese a los reclamos, no consiguieron conocer la verdad sobre el destino final de sus familiares. Versiones de militares arrepentidos indican que fueron asesinados y sus cuerpos arrojados al mar.
No obstante, la tarea de las abuelas logró cumplir parte de sus metas al encontrar a 57 menores, someterlos a pruebas genéticas en el Banco de Datos Genéticos creado a sus instancias, y restituirles su identidad.
No todos los menores encontrados volvieron con su familia de sangre. En algunos pocos casos habían sido adoptados de buena fe y permanecieron con las familias adoptivas, aunque establecieron vínculos con los parientes sanguíneos, fundamentalmente abuelos, tíos y primos.
Además, las abuelas tuvieron otros triunfos. A fines de 1996 un grupo de ellas presentó una querella por sustracción de menores contra ex altos oficiales de la dictadura, entre ellos el ex comandante Reynaldo Bignone y el ex ministro del Interior Albano Harguindeguy.
La querella fue presentada 20 años después porque recién entonces se reunieron pruebas del delito. Cuando los militares fueron juzgados y condenados en 1985 por violaciones a los derechos humanos, el tribunal consideró que no había pruebas para condenarlos por robo de niños.
Pero en estos años, las abuelas consiguieron documentos que prueban que había instrucciones del Ejército para proceder con los menores de edad que eran hijos de detenidos.
"Estamos en condiciones de demostrar ahora que la sustracción de menores fue un delito cometido en forma sistemática y programada", expresó Carloto en 1996.
Las leyes de punto final y obediencia debida, que liberaron de proceso a miles de suboficiales que participaron de la represión ilegal en 1987, establecen de manera explícita que no alcanzan a los casos de aquellos que hubieran robado niños.
Las abuelas guardan esperanzas de que sean juzgados y condenados los que perpetraron ese delito.
Carloto sufrió el secuestro de su hija Laura en 1977. La joven estaba embarazada de un mes y su madre probó que el niño nació en el Hospital Militar. Laura murió en 1978 después de haber dado a luz.
Los responsables del secuestro y la muerte de Laura fueron indultados en 1990, pero Carloto tiene esperanzas de encontrar a su nieto.
La presidenta de Abuelas hará una síntesis de la labor de la asociación durante estos 20 años ante el papa, y luego viajará a Italia ara reunirse con el juez que investiga los casos de más de 600 desaparecidos de origen italiano durante la dictadura argentina.
Entretanto, en este país, se recordarán los 20 años de la agrupación con una serie de homenajes que comienza este viernes y sábado con recitales de rock y murgas en Buenos Aires.
El domingo se sumarán artistas plásticos y el lunes los actores desde el Teatro Nacional Cervantes de esta capital. (FIN/IPS/mv/dg/ip-hd/97)