La Confederación de Trabajadores de México (CTM), afiliada al partido de gobierno, se sumó hoy a las críticas expresadas durante años por grupos humanitarios y sindicatos independientes contra el régimen laboral imperante en las empresas de maquila.
Portavoces de la CTM indicaron que los próximos días entregarán al presidente Ernesto Zedillo un estudio en el que documentan numerosas violaciones a los derechos laborales en las maquilas, que constituyen uno de los puntales del comercio exterior del país y emplean a cerca de 900.000 personas.
Los empleados de las empresas en las maquilas trabajan sin estabilidad, con salarios por hora y no cuentan con prestaciones sociales elementales como seguro médico, aguinaldo, vacaciones y reparto de utilidades, dijo Porfirio Camarena, subsecretario de Asuntos Económicos de la CTM.
Además, en varias de las empresas, donde se ensamblan televisores, computadoras, muebles, prendas de vestir y componentes electrónicos, entre otros productos, las obreras son objeto de acoso sexual por parte de sus jefes, apuntó Camarena.
La CTM, central afiliada al gobernante Partido Revolucionario Institucional (PRI), nunca había realizado una crítica tan frontal contra las maquilas.
Algunos de sus miembros, incluso, han calificado de exageradas las denuncias en ese sentido efectuadas por grupos humanitarios y sindicatos independientes.
El Frente Auténtico del Trabajo de México atribuyó el auge de la maquila de los últimos años a la explotación de sus trabajadores, sometidos a labores repetitivas, sin creatividad y con escasa remuneración, y al bloqueo de todo intento para formar sindicatos en esas zonas.
Informes de la organización internacional Human Rights Watch sostienen que en las maquilas se discrimina la mano de obra femenina, mayoritaria en esa industria, y se bloquea la gestión de los sindicatos.
Las plantas ensambladoras, cuyas ventas representan alrededor de 40 por ciento del total de las exportaciones mexicanas, fueron instaladas por primera vez en 1965.
En 32 años se mostraron inmunes a los episodios de crisis económica y se tranformaron en una importante fuente de empleo.
La maquila es una forma de subcontratación internacional en la que empresas e inversionistas de un país, generalmente desarrollado, proveen capital, tecnología e infraestrucura a otro, menos desarrollado, que pone la mano de obra.
La mayoría de las maquilas mexicanas, ubicadas en la frontera con Estados Unidos, "están evadiendo el cumplimiento de la ley", lo que afecta la imagen de la CTM y a su trabajo sindical, dijo Camarena.
Los sindicatos independientes han acusado en repetidas ocasiones a la CTM de avalar el régimen laboral de las maquilas para favorecer la imagen del gobierno y facilitar las inversiones extranjeras.
Hoy operan en México 2.699 plantas de maquila. La mayoría pertecenece a capitales de Asia y Estados Unidos. (FIN/IPS/dc/mj/hd lb if/97