AMERICA LATINA: Integración no llegó a la agricultura colonizada

La integración es la "única forma" de superar los efectos negativos de la globalización en América Latina y el Caribe y las distorsiones de una agricultura aún subordinada a políticas del Norte industrializado, manifestó hoy el Parlamento Latinoamericano.

"El espacio económico integrado de América Latina debe ser articulado en forma prioritaria a toda otra estrategia", aun antes que el Area de Libre Comercio de las Américas, dice la resolución de la Comisión de Agricultura, Ganadería y Pesca del Parlatino, aprobada luego de dos dias de sesión en Sao Paulo.

Esta declaración se basa en un informe que confirma la persistencia de la fuerte dependencia regional en relación a los mercados agrícolas septentrionales.

Alrededor de 65 por ciento de las exportaciones agrícolas latinoamericanas se destinan a países industrializados y solo 12 por ciento al comercio intrarregional, según el informe, que menciona en ese sentido datos de la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).

Por el lado de las importaciones agrícolas, América Latina y el Caribe compran 62 por ciento de los países ricos y apenas 28 por ciento de la propia región. En contraste, la Unión Europea "importa de sí misma 62 por ciento" de sus compras en ese rubro.

Ese es "el corolario inevitable del papel subordinado de las políticas agrícolas de nuestros países", con la asignación de recursos y la formación de precios determinadas por "un mercado distorsionado".

La tendencia, según los datos de FAO, indica un deterioro de la situación, por precios desfavorables. De 1988 a 1993 la región aumentó en 13 por ciento el volumen exportado, pero vio caer 15 por ciento los ingresos obtenidos.

En comparación con las exportaciones, el precio promedio de las importaciones bajó 30 por ciento entre 1987 y 1993.

La Comisión del Parlatino destacó que, aunque la participación de la agricultura se redujo a diez por ciento de la economía latinoamericana, el sector sigue empleando a 40 millones de trabajadores y sostiene las condiciones económicas de un cuarto de la población regional.

Profundizar la integración regional, aumentando el comercio agrícola entre los propios países latinoamericanos, es el camino apuntado para solucionar las desventajas que no se redujeron por acuerdos mundiales, según la Comisión de Agricultura del Parlatino.

El informe de la FAO de 1995 destaca que los países en desarrollo perdieron participación en las exportaciones agrícolas mundiales, bajando de 40 por ciento en los años 60 a 27 por ciento en esta década. Mientras tanto, la Unión Europea elevó de 20 a 45 por ciento su participación en ese comercio. (FIN/IPS/mo/mj/if dv/97

Archivado en:

Compartir

Facebook
Twitter
LinkedIn

Este informe incluye imágenes de calidad que pueden ser bajadas e impresas. Copyright IPS, estas imágenes sólo pueden ser impresas junto con este informe