Representantes de 150 países lanzaron el lunes 20 un esfuerzo final por alcanzar acuerdos básicos para la conferencia internacional sobre cambio climático de la ciudad japonesa de Kyoto, que debe fijar nuevas metas de recorte de la emisión de gases invernadero.
El momento culminante de las conversaciones se tendrá el miércoles, al comenzar una sesión del grupo ad hoc del mandato de Berlín.
El grupo ad hoc fue creado hace dos años, en la primera conferencia de las partes de la Convención Marco de Naciones Unidas sobre Cambio Climático, para negociar nuevos compromisos del Norte industrial en materia de reducción de emisiones para el periodo posterior al 2000.
Los gases invernadero, entre los que se destaca el dióxido de carbono (CO2), provocan el aumento de la tenperatura de la Tierra, con el consiguiente elevación del nivel de los océanos, según la opinión científica predominante.
Las grandes naciones industriales convinieron en la Cumbre de la Tierra, de 1992, disminuir para el 2000 la emisión de gases invernadero al nivel registrado en 1990.
Ese compromiso fue incorporado a la Convención Marco de Cambio Climático, y se debe actualizar en la conferencia de Kyoto, a realizarse del 1 al 10 de diciembre, para proceder a un nuevo recorte de emisiones.
La sesión que comenzará el miércoles será la última del grupo ad hoc antes del encuentro de Kyoto.
El presidente del grupo ad hoc, el diplomático argentino Raúl Estrada Oyuela, produjo un texto que recoge ls propuestas de mayor y menor alcance en materia de rcorte de emisiones, informó el secretario ejecutivo de la Convención, Michael Zammit Cutajar.
Sobre la base de ese texto, los delegados intentarán elaborar para el día 31 un borrador conteniendo objetivos vinculantes y un calendario para la reducción de emisiones, dijo Zammit Cutajar a IPS.
También procurarán redactar un documento adicional sobre asuntos relacionados al tema central, como un posible régimen de comercio de cuotas de reducción de emisiones, actividades conjuntas y políticas y medidas internacionales coordinadas.
El texto de Estrada Oyuela "es una buena base para lograr progreso importante. Así mismo, la perspectiva de que Estados Unidos presente una propuesta, que se uniría a los planes de la Unión Europea (UE) y Japón, estimula las negociaciones", comentó Zammit Cutajar..
Estados Unidos aún debe presentar su proyecto de recorte de gases invernadero o su reacción ante la propuesta de la UE de disninuirlas 15 por ciento en el 2010.
La Alianza de Pequeños Estados Insulares, cuya existencia está amenazada por el aumento del nivel de los mares resultante del cambio climático, solicitó la reducción de 20 por ciento de las emisiones de CO2 para el 2005.
La base para la reducción es el volumen de emisiones registrado en 1990, que debe alcanzarse en el 2000, según los acuerdos firmados en 1992.
Japón, que como país huésped de la conferencia de diciembre jugará un papel clave en la búsqueda de consenso, propuso hace tres semanas que el Norte reduzca cinco por ciento al año su emisión de CO2, metano y óxido nitroso en el periodo 2008-2012.
El primer ministro japonés Ryutaro Hashimoto expresó esperanza en que "esta propuesta sea la base de negociaciones" de amplia participación.
Pero su plan fue objetado por organizaciones no gubernamentales. "La fórmula de Japón adjudica a Estados Unidos, responsable de más de 20 por ciento de la emisión total de gases invernadero, una reducción de sólo 2,6 por ciento", advirtió Deli Villagrasa, director de la Red Europea de Clima, de Bruselas.
"Para Australia, la proporción es de 1,8 por ciento y para Japón, de un absurdo 2,5 por ciento", según el cálculo de Villagrasa.
Walter Hirche, del Ministerio de Ambiente de Alemania, al parecer estuvo de acuerdo. "Esa reducción no es adecuada para enfrentar el desafío del cambio climático", dijo.
La propuesta de Japón "es una gran decepción", declaró el embajador de Malasia en la UE, Renji Sathiah. Se trata de una reducción "demasiado pequeña para tener significado".
Sathiah instó a la UE a tomar la iniciativa en busca de un recorte importante de emisiones, y a unirse en ese propósito con el Grupo de los 77 (G-77), representante en la Organización de Naciones Unidas del Sur en desarrollo.
"La UE debe convencer a sus vacilantes socios del Norte de la necesidad de hacer de Kyoto una divisoria de aguas en materia de combate contra el cambio climático", agregó Sathuah, que habó en nombre del G-77, conformado por 132 países.
Zammit Cutajar coincidió con ese punto de vista, al menos parcialmente, al decir este lunes a la prensa que "si no se logra acuerdo en Bonn se verificará un gran retroceso, probablemente de solución imposible".
Agregó que los países del Norte tienen la responsabilidad de lograr acuerdo para la reducción de las emisiones de gases invernadero. (FIN/IPS/tra-en/raj/mk/ff/en/97