La reunión anual del FMI y el Banco Mundial le costará este mes a las arcas públicas de Hong Kong más del doble que las ceremonias de retorno a la soberanía de China, a pesar de que no habrá actos culturales ni fuegos artificiales.
Los contribuyentes de Hong Kong pagarán más de 62 millones de dólares para recibir a altos funcionarios de las finanzas de todo el mundo a partir del día 17. Entonces comenzarán las sesiones preliminares de la conferencia que se abrirá el día 22 y durará una semana.
Esta cantidad más que duplica los 25 millones de dólares de fondos públicos gastados en docenas de celebraciones populares y agasajos a dignatarios extranjeros en las ceremonias de entrega de la antigua colonia de Gran Bretaña a China la madrugada del 30 de junio.
Se prevé que unos 13.000 funcionarios acudirán a Hong Kong para la reunión anual del FMI (Fondo Monetario Internacional) y el Banco Mundial, que se desarrollará en el mismo Centro de Convenciones donde se izó por primera vez la bandera china el 1 de julio.
Incluso quienes están familiarizados con las operaciones del Banco Mundial, entre ellos los legisladores que aprobaron el desembolso para la reunión en 1995, se han preguntado si el dinero que se dedicará a la reunión no es demasiado extravagante.
Los más críticos dudan si los contribuyentes de Hong Kong deben pagar por una conferencia de organizaciones internacionales tan solventes y si ese dinero no estaría mejor gastado en otros asuntos.
"Esto no es como las Olimpíadas o un acontecimiento del que podamos sentirnos orgullosos. Es apenas una convención. El costo no está justificado", dijo May Wong, del grupo de presión Pioneer.
"La gente no sabe ni siquiera qué es el Banco Mundial o el FMI. Cuando hicimos una encuesta informal entre trabajadores, descubrimos que ninguno había escuchado sobre ellas ni sabía qué hacían", agregó.
Las reuniones anuales del FMI y el Banco Mundial alternan sus sedes entre Washington y otros lugares del mundo. La última vez que se celebró en Asia fue en 1991 en Bangkok. La capital de Tailandia gastó entonces unos 25 millones de dólares.
"Bangkok es una ciudad más barata, y desde entonces hubo inflación", argumentó un funcionario de la Autoridad Monetaria de Hong Kong (HKMA), responsable de la conferencia.
Pero China desea reafirmar ante el mundo que la marcha de los negocios en Hong Kong no se ha alterado desde la partida de Gran Bretaña y asegurar que las ciudades del gigante asiático pueden ser sede de grandes reuniones internacionales tan bien como cualquier urbe de Occidente.
"Habrá grandes beneficios para Hong Kong. La presencia de ministros de Finanzas, gobernadores de bancos centrales, altos funcionarios y grandes banqueros poco después de la asunción de la soberanía impulsará la confianza de la región", sostuvo un vocero de la autoridad monetaria local.
"El acontecimiento también reafirmará la categoría de Hong Kong como centro financiero mundial", agregó.
"Es un espectáculo para los banqueros. La idea es cenar y tomar vino con ellos para hacerlos sentir bien en China", sostuvo Wong.
La HKMA asegura que Hong Kong ganará 51,6 millones de dólares por albergar la reunión, cifra estimada en base a la asistencia de 10.000 participantes que gastarán 516 dólares cada noche durante 10 jornadas.
Pero los hoteleros ya se dieron cuenta de que muchos delegados no pernoctarán en Hong Kong diez noches, sino cinco o seis.
Ya había sucedido durante las ceremonias de entrega, pues los visitantes evitaron los hoteles entonces. La ocupación durante los actos del 31 de junio fue 14 por ciento más baja que en junio de 1996.
Cada año, la reunión del FMI y el Banco Mundial concentra la atención por su alto costo, mientras los países pobres asisten para reclamar el desembolso de fondos necesarios para proyectos de desarrollo.
Más de 2,6 millones de dólares se utilizarán en el transporte, la seguridad, la publicidad y entretenimientos para los visitantes.
"Debemos facilitar 250 vehículos caros para el uso de los presidentes del Banco y el FMI, los de las delegaciones y altos oficiales", explicó un vocero del HKMA.
La Federación de Estudiantes integra una coalición de grupos de presión que realizará protestas durante la reunión, anunció el dirigente Tam Chun-yin.
"El Banco y el FMI hablan de milagro económico cuando se refieren a Hong Kong, pero eso es una falacia. Hay una alta pobreza aquí", aseguró Tam.
La cantidad de personas que viven debajo del nivel de pobreza se triplicó en los últimos 25 años, según una investigación de la Sociedad de Seguridad Social de Hong Kong.
Más de 856.000 personas, 14 por ciento de la población de la región, tienen ingresos menores al mínimo indispensable para subsistir en esta ciudad con alto costo de vida. (FIN/IPS/tra- en/ys/js/mj/ip if/97