¿Buenos Aires será la ciudad que albergue los Juegos Olímpicos de 2004? El viernes próximo se sabrá si el "Corredor Olímpico", el gran atractivo de la capital de Argentina, supera las ofertas de Atenas, Ciudad del Cabo, Estocolmo o Roma.
El presidente Carlos Menem, uno de los argentinos más entusiasmados con el proyecto, decidió viajar este martes a Lausana, Suiza, adonde se reúne el Comité Olímpico Internacional (COI), para ser testigo directo del veredicto que den los 109 miembros del Comité.
Entre los electores hay 43 europeos, 21 americanos, 20 africanos, 20 asiáticos y cinco oceánicos. La elegida será la que obtenga 55 sufragios. Antes de votar, los miembros escucharán una última presentación de las ofertas.
Todas aspiran a ser sede de unos juegos que además de prestigiar a la ciudad, abultarán sus arcas. A la sede le corresponde 49 por ciento de los ingresos originados en la televisación a todo el mundo y la contratación de sponsors, unos 1.000 millones de dólares.
Si Buenos Aires es elegida, espera conseguir 3.000 millones en divisas por concepto de turismo e inversiones. Sería, además, la primera vez que los centenarios juegos se realizan en América del Sur.
Río de Janeiro peleó hasta marzo pero quedó afuera junto a otras cinco ciudades.
Según adelantos de la prensa argentina en Lausana, muchos hablan allí de Atenas y Roma, y menos mencionan a Buenos Aires o Ciudad del Cabo.
En la capital de Italia ya se realizaron los juegos en 1960 y las instalaciones estarían intactas. Estocolmo, que sufrió atentados contra sus estadios en los últimos meses, tendría menos chances.
Pero como explican los miembros de la Comisión argentina, "todo puede suceder", de ahí que sea difícil hacer un pronóstico.
Un punto a favor de Argentina, dicen ellos, es el respaldo al más alto nivel. En ninguna otra sede los visitantes del comité eran recibidos por el presidente. Aquí, el propio Menem los acompañaba, junto al alcalde de la capital, Fernando de la Rúa, de la opositora Unión Cívica Radical.
"No hay lógica. Se supone que si las cinco llegaron a ser finalistas es porque las cinco tienen las mismas posibilidades técnicas", dijo a IPS Ernesto Rodríguez, jefe del Departamento de Voluntarios del Comité argentino.
El sistema de votación puede arrojar sorpresas. Si en la primera vuelta ninguna ciudad consigue los 55 votos necesarios, hay otra vuelta en la que ya no participa la menos votada. Las rondas se repiten y en cada una se elimina a la última hasta que se consigue el porcentaje requerido.
Este sistema implica que una ciudad favorita en las dos primeras rondas puede perder si en la tercera los que votaban a las que quedaron descalificadas respaldan a una candidata más débil. Esa parece ser la apuesta argentina.
Rodríguez explicó que cada ciudad tiene un punto fuerte. Roma cuenta con un poderoso grupo de presión concentrado en lograr la mayor cantidad de apoyos europeos.
Atenas espera una reparación histórica. En 1996, cuando se cumplían 100 años de la realización de los juegos en Atenas, el comité, en lugar de volcarse por la capital griega, que llegó a ser finalista, optó por la estadounidense Atlanta.
Para el 2000, Beijing aparecía como favorita en la prensa. Sin embargo, la más votada en las primeras rondas fue Massachusets (Estados Unidos) y finalmente se impuso Sidney (Australia).
Pero Buenos Aires también tiene algunas ventajas. El hecho de que nunca se hayan realizado juegos en América del Sur no es una razón de tanto peso -tampoco se celebraron en Africa- como el atractivo que ejerció en los visitantes el concepto del Corredor Olímpico.
Se trata de un área de 15 kilómetros de extensión paralela a la costa de la ciudad, en donde se concentrarían las instalaciones para 28 de las 31 disciplinas deportivas, además de la villa para los atletas y los centros de prensa.
La ubicación del corredor, en torno a la ciudad, permite que los juegos se realicen sin las interferencias propias del ritmo de una ciudad que, con sus suburbios, tiene 13 millones de habitantes.
El 70 por ciento de los ciudadanos apoya la realización de los juegos y hay 65.000 voluntarios inscriptos.
Las instalaciones, 75 por ciento de las cuales ya existen y sólo habría que mejorar, se ofrecen por el más bajo presupuesto de las cinco. (FIN/IPS/mv/ag/cr/97