Con el fin de ampliar los espacios de diálogo y concertación, el Programa de las Naciones Unidas para el desarrollo (PNUD) promueve en Colombia el proyecto "Nueva cultura de las Relaciones Laborales", en el que participan gobierno, empresarios y trabajadores.
El proyecto surgió en 1995 como respuesta "a la dinámica mundial de la economía, que requiere cambios en las relaciones de trabajo, según Luis Garzón, presidente de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), la mayor del país.
También participan la minoritaria Confederación de Trabajadores de Colombia (CTC), la Unión de Trabajadores de Cundinamarca (Utracun) y la Federación Agraria Nacional (Fanal).
La dirección del proyecto está a cargo de un delegado del Ministerio del Trabajo, que cuenta también con dos representantes del PNUD y cuatro delegados de los gremios empresariales.
Para la ejecución del proyecto se han constituido grupos tripartitos apoyados por un comité de seguimiento y evaluación en el que participan el estatal Departamento de Planeación Nacional (DNP) y una consejería económica de la Presidencia de la República.
El proyecto cuenta con el apoyo de la organización Internacional del Trabajo (OIT) y de las direcciones departamentales del Trabajo, dependientes del Ministerio del Trabajo.
El principal programa desarrollado por el proyecto es el de formación de dirigentes sindicales y empresariales que se lleva a cabo en las ciudades de Bogotá, Cali (oeste), Medellín (noroeste), Barranquilla (norte) y Bucaramanga (este).
La extensión a las cuatro principales ciudades colombianas además de la capital busca llegar a los 5,4 millones de personas ocupadas que hay en el país, según el coordinador del proyecto, Gerardo Ardila, representante del PNUD.
Ardila indicó que el proyecto es importante porque vincula las relaciones laborales a procesos de concertación que propician la paz en un país como Colombia, que "no resiste más confrontación" y necesita que los sectores vinculados a la producción "se desarrollen en medio del entendimiento".
Al conflicto armado interno que vive Colombia desde hace casi cuatro décadas se suman otros factores de violencia en este país de 36 millones de habitantes, donde anualmente son asesinadas cerca de 28.000 personas.
Julio Higuera, encargado del PNUD para la administración del proyecto, estima que "la intolerancia que se vive a diferentes niveles también se refleja en las relaciones laborales", por lo que la búsqueda de nuevas formas de entendimiento pueden significar un aporte a la paz.
El sector sindical ha sufrido el asesinato de cerca de 2.000 activistas en la última década a causa de la intolerancia de los grupos paramilitares de derecha, según la CUT.
La globalización de la economía, la productividad y competitividad, y la ética en las relaciones laborales, son los temas principales que se han tratado en los 18 seminarios que se han realizado en desarrollo del programa.
Paula López, representante en el proyewcto del ministerio del Trabajo, Dijo a IPS que en los seminarios han participado más de 2.000 trabajadores que han hecho importantes aportes para el mejoramiento de las relaciones obrero-patronales y para el aumento de la productividad.
Según Higuera, el proyecto estaba inicialmente trazado para finalizar en marzo de este año, pero es probablemente que se extienda hasta diciembre y se está trabajando en una propuesta al gobierno para que se convierta en una política permanente.
Además, como apoyo de difusión para el proyecto se creó el programa "Chóquelas", que se difundió por espacio de un año por el canal estatal de televisión.
En "Chóquelas" se mostraban las experiencias positivas y negativas de empresas y trabajadores en sus relaciones laborales y sus formas de solución.
El programa tuvo proyección en Venezuela, donde el anterior coordinador por el PNUD, Angelino Garzón, dictó varios seminarios que contaron con el apoyo de la OIT. (FIN/IPS/yf/ag/dv-lb/97