El presidente de Colombia Ernesto Samper calificó el martes de "un paso adelante" en las relaciones con Estados Unidos la visita que realizó a Bogotá el director de la agencia antidrogas de ese país (DEA), Thomas Constantine.
Durante su visita de tres horas a Bogotá Constantine se entrevistó con los ministros Gilberto Echeverry, de Defensa, Almabeatriz Rengifo, de Justicia, y María Ema Mejía, de Relaciones Exteriores.
También se encontró con el director de la Policía Rosso Serrano y el personal dedicado a la lucha contra el narcotráfico, a quienes rindió homenaje por su labor, y con el embajador de su país Myles Frechette.
El viaje de Constantine se suma a la decisión del Congreso estadounidense, el viernes pasado, de reanudar la ayuda a las unidades militares colombianas que trabajan en la lucha antinarcóticos.
La asistencia militar, de cerca de 70 millones de dólares, fue aprobada tras la firma de un memorando de entendimiento que incluye un compromiso de las Fuerzas Armadas colombianas de respetar los derechos humanos.
Pese a que Bogotá fue evaluada negativamente por Washington en marzo por su desempeño en la lucha antidrogas, la DEA y el Congreso del país norteamericano exaltaron la labor de la policía.
La evaluación negativa fue interpretada por los analistas como una señal de desaprobación de la política de Samper, acusado por el gobierno de Bill Clinton de haber recibido dinero del narcotráfico para su campaña electoral en 1994.
La policía colombiana entregó el martes a Constantine un informe según el cual entre el 1 de enero y el 31 de julio fueron destruídas 22.559 hectáreas de cultivos de hoja de coca y 4.463 de amapola y se incautaron 24.020 kilos de cocaína pura, 4.764 de pasta de coca y 125.263 de marihuana prensada.
El crecimiento de los cultivos de amapola, de la que se extrae el látex para el procesamiento de la heroína, es uno de los aspectos que más preocupa a autoridades de los dos países, que se proponen crear un grupo especial para combatir su procesamiento y comercialización.
Mientras algunas autoridades estadounidenses indican que Colombia produce 1,5 por ciento de la heroína que se comercializa en el mundo, otras afirman que controla 90 por ciento del comercio de esta droga en Estados Unidos. (FIN/IPS/yf/dg/ip