El calentamiento de las corrientes oceánicas en la costa oeste de América del Sur, causante de las alteraciones climáticas que acompañan el fenómeno del Niño, comenzó a sentirse en Colombia, donde las autoridades alertaron a la población para prevenir desastres.
La elevación de la corriente marina e inundaciones en algunas regiones y sequías en otras, son algunos de los efectos de la presencia del Niño en Colombia, según el estudio realizado por el Instituto de Hidrología, Metereología y Estudios Ambientales (IDEAM).
Las conclusiones del informe, dadas a conocer por el ministro del Medio Ambiente, Eduardo Verano, indican que la sequía extrema que se producirá expone a incendios al sector forestal.
Con el último incendio forestal en Puerto Triunfo, en el noroccidental departamento de Antioquia, que cumplió este jueves siete días, ya se han presentado 1.303 casos de este tipo en todo el país en los dos últimos meses.
El norte de Colombia es la zona que mayor peligro de incendios forestales presenta, porque estará sometida a las mayores sequías.
En la región andina, en el centro del país, los agricultores deberán estar alerta para proteger sus cosechas de los días secos y las heladas nocturnas.
El Ministerio del Medio Ambiente llamó a la población a que evite fogatas, recoja basuras y desechos, y no arroje vidrios o materiales inflamables sobre la vegetación.
El gobierno está gestionando la donación de equipos para combatir estos incendios forestales, que ya han causado la destrucción de 47.000 hectáreas.
Los fuertes fluctuaciones climáticas que se han producido en Bogotá en las primeras semanas de este mes fueron atribuidas al fenómeno del Niño.
Los efectos del Niño se sintieron con fuerza en Colombia en 1992, cuando la aguda sequía y la falta de previsión de las autoridades del sector energético obligó a un racionamiento de electricidad que se prolongó por un año.
La pequeña y mediana industria sufrió pérdidas superiores a 1.000 millones de dólares a causa del racionamiento y se debió adelantar una hora la jornada laboral.
El viceministro de Minas y Energía, Carlos Conte, anunció que en esta oportunidad se cuenta con recursos energéticos suficientes para hacer frente a un fenómeno de la intensidad del que se presentó en 1992.
El plan gubernamental contempla el refuerzo de la generación térmica mediante la construcción de nuevas plantas en caso de que se produzca reducción grave en las hidroeléctricas, que cubren más del 70 por ciento de la demanda.
El llamado de alerta frente a las alteraciones que pueden producirse con la llegada del Niño a Colombia se extendió el día 4 a los paises miembros de la Comisión Permanente del Pacífico Sur (CPPS), que una reunión realizada en Bogotá incluyó el estudio del tema entre sus tareas prioritarias.
Los países de la CPPS (Chile, Colombia, Ecuador y Perú) anunciaron que incentivarán su cooperación para enfrentar la "variabilidad climática asociada al fenómeno del Niño, que tiene un considerable efecto económico, social y ambiental".
Las alteraciones climáticas que acompañan el fenómeno del Niño solían comenzar cerca de Navidad (de donde toma su nombre) y tenían una duración aproximada de tres meses, pero este año se han adelantado y, según la dirección Nacional Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos, van a ser más fuertes. (FIN/IPS/yf/ag/en/97