El mayor problema que padece el turismo de Barbados es el hostigamiento a los visitantes, de acuerdo con un estudio de la Organización de Turismo del Caribe (OTC), con sede en esta capital.
El informe advierte que el acoso sexual, el ofrecimiento de drogas y el abuso verbal contra los turistas están en aumento en esta isla del este del Caribe y podrían perjudicar a la industria a largo plazo.
"Mucha gente dice que no volverá más y que tiene miedo de caminar por la calle de noche, especialmente en St. Lawrence Gap, uno de los sitios turísticos más populares de la isla", lamentó el presidente de la Asociación de Hoteles y Turismo de Barbados, Alan Banfield.
Los McGrath, de Houston, Texas, son una de las familias que decidieron no volver a poner un pie en Barbados, aunque fueron visitantes regulares de la isla durante los últimos 11 años. La familia tuvo que interrumpir su visita hace un mes porque ya no podía soportar el hostigamiento.
"Lo siento pero no volveré más, porque mis hijas adolescentes y mi esposa recibieron un constante acoso verbal de obreros de la construcción que trabajaban frente al Umpires Inn, cerca del club de playa Sand Acres, en la costa sur", manifestó Eaton McGrath.
"Aunque el comportamiento de los obreros no es responsabilidad directa de sus supervisores, la impresión que recibí es que a nadie le importaba cómo esa conducta afecta a los turistas", agregó.
Los McGrath habían llegaron en julio a Barbados con la intención de pasar tres semanas, pero luego de una semana se dirigieron a Santa Lucía para continuar allí sus vacaciones y dijeron que esa isla bien podría convertirse en su nuevo destino preferido del Caribe.
El estudio de la OTC, realizado para el Ministerio de Turismo, reveló que 10,4 por ciento de los turistas que visitaron la isla entre septiembre y diciembre de 1996 se quejaron de acoso sexual, frente a 2,6 por ciento durante el mismo período del año anterior.
La proporción de visitantes que dijeron haber recibido ofrecimientos de drogas también aumentó de 6,8 a 17,6 por ciento, mientras los que denunciaron abusos verbales pasaron de 2,7 a 7,6 por ciento.
Los turistas están crecientemente preocupados porque ya no pueden andar por la playa, la calle o los hoteles sin ser molestados.
El informe reveló que, el año pasado, 39,2 por ciento de los visitantes dijeron haber sido hostigados en la playa, frente a 12,4 el año anterior; 32,2 por ciento en la calle, en comparación con 15,7 por ciento en 1995, y 20,4 por ciento en la capital, frente a 11,2 por ciento el año anterior.
Oral Reid, encargado de Prensa y Relaciones Comunitarias de la policía, dijo que, si bien es responsabilidad de la institución policial llevar a los delincuentes ante la justicia, los operadores turísticos deben reconocer que los agentes no pueden estar en todas partes a toda hora.
Pero Banfield opinó que el concepto policial de acoso debe cambiar si se pretende eliminar exitosamente el hostigamiento a los turistas.
Según algunos funcionarios policiales, el término "acoso" no está definido en ningún texto o manual ni está consagrado en la doctrina general de trabajo de la Real Fuerza Policial de Barbados.
Por otra parte, la Asociación de Hoteles y Turismo de Barbados sostiene que una persona que rompe la cáscara de un coco con los dientes y pide dinero a los turistas por su hazaña está cometiendo acoso.
Por lo tanto, también comete acoso la persona que extiende la mano con la intención de vender drogas, al igual que los exhibicionistas que se ocultan en las playas para exponerse inesperadamente ante los turistas.
De todos modos, la industria del turismo generó 700 millones de dólares en 1996, frente a 680 millones en 1995.
En 1996, cerca de 447.000 extranjeros visitaron la isla, en comparación con 442.000 en 1995. En los primeros cinco meses de este año, Barbados recibió 197.000 turistas. (FIN/IPS/tra-en/dv/cm/cb/ml/if/97
