El gobierno de Cuba acusó este sábado al de Estados Unidos de promover una guerra sucia contra el país caribeño que incluye la promoción, financiamiento y apoyo logístico a la subversión interna.
Raúl Castro, segundo secretario del gobernante Partido Comunista y ministro de las Fuerzas Armadas, hermano del presidente Fidel Castro, habló durante el acto central en conmemoración del Día de la Rebeldía Nacional, que se transmitió en vivo por las cadenas nacionales de radio y la televisión.
Unas 140.000 personas llenaron la plaza especialmente construida para este día en la provincia de Las Tunas, 690 kilómetros al este de La Habana.
Las expectativas alrededor del tradicional discurso del presidente Fidel Castro se diluyeron este mismo sábado cuando el diario oficial Granma reveló que el presidente sólo presidiría el acto político.
El ministro de las Fuerzas Armadas calificó de "franca e inadmisible actitud injerencista" que el jefe de Asuntos Cubanos del Departamento de Estado aprovechara una vista de trabajo a Cuba para reunirse con cabecillas de varios grupos ilegales.
El funcionario acusado, Michael Rannenberger, estuvo en la isla a inicios de junio y se reunió con funcionarios del ministerio cubano de Relaciones Exteriores, con miembros del Partido Comunista y representantes de la Iglesia Católica.
Castro aseguró que en reuniones con cubanos disidentes, el funcionario estadounidense los incitó a la realización de actos de desobediencia civil y prometió ayuda logística y más de un millón de dólares para su financiamiento.
La nueva acusación sucede a la explosión el sábado 12 de dos artefactos en los hoteles Capri y Nacional, en el centro de la isla, que ocasionaron tres heridos leves y escasos daños materiales.
Castro aseguró que el atentado contra los hoteles "no se trata de una acción aislada" y que en los últimos años se han frustrado varios planes similares en la isla.
El ministro de las Fuerzas Armadas reiteró que existen pruebas de que esos planes se organizan en Estados Unidos, que en territorio de ese país se entrena el personal encargado de esas misiones y que de allí provienen los medios que se utilizan.
Tenenemos en "nuestro poder varios medios y ejecutores de frustrados intentos", algunos "ya sancionados y otros sometidos a procesos legales", afirmó.
Castro afirmó que el gobierno de Estados Unidos estaba al tanto de estas actividades y que con anterioridad a los sucesos del 12 de julio el gobierno de Cuba le había hecho llegar un informe sobre planes y hechos.
Cuba sostiene que en los últimos años han sido detectados en Estados Unidos unos 15 grupos que realizaban u organizaban actividades subversivas contra el gobierno de Cuba y que de 43 personas involucradas, sólo tres fueron condenadas y ya están en libertad. (FIN/IPS/da/jc/ip/97
