La extrema pobreza podría desaparecer del mundo en una o dos décadas, predijo el principal coordinador del Informe sobre Desarrollo Humano 1997, que fue presentado hoy en la sede de la Organización de las Naciones Unidas.
La pobreza disminuyó más rápidamente en los últimos 50 años que en las anteriores 50 décadas, asegura el informe, elaborado por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).
Varios países en desarrollo se encuentran en camino hacia la eliminación de la pobreza, incluyendo algunos de los más grandes – como China- y algunos de los más dinámicos, como Chile, Malasia, Mauricio y Corea del Sur.
El estudio introduce un nuevo Indice de Pobreza Humana (IPH), que mide la pobreza país por país desde una perspectiva de desarrollo humano, tomando en cuenta otros factores además del ingreso.
"Los bajos ingresos no son la causa más grave de pobreza, sino la baja expectativa de vida, el analfabetismo y la falta de acceso a servicios de salud, agua potable y alimentación adecuada", dijo a IPS Richard Jolly, coordinador del informe.
"Para medir la pobreza humana hay que tener en cuenta todos esos elementos", subrayó.
Los primeros cinco país en la lista (Trinidad y Tobago, Cuba, Chile, Singapur y Costa Rica) redujeron la pobreza humana a menos de 10 por ciento de su población.
Al final de la nómina se encuentran siete países cuya pobreza humana aflige a más de 50 por ciento de sus habitantes: Níger, Sierra Leona, Burkina Faso, Etiopía, Mali, Camboya y Mozambique.
De los 5.700 millones de personas que habitan el mundo, unos 1.300 millones sobreviven actualmente con menos de un dólar por día, según estimaciones del Banco Mundial, y 3.300 millones tienen un ingreso de 750 dólares por año (poco más de dos dólares por día).
"No debemos resignarnos a que la pobreza esté siempre con nosotros", exhortó el administrador del PNUD, Gustave Speth.
"El mundo posee recursos materiales, naturales, tecnológicos y humanos para hacer realidad un mundo sin pobreza en menos de una generación. No se trata de idealismo, sino de un objetivo práctico y realizable", agregó.
Hace 160 años, el mundo lanzó una campaña contra la esclavitud, y "hoy, todos debemos contribuir a una cruzada similar por un mundo sin pobreza", exhortó Speth.
El estudio establece que la mayor parte de la población del planeta ha recibido los beneficios de los grandes avances en materia de oportunidades económicas y bienestar humano.
"Para el mundo en desarrollo, esos logros cubrieron tanta distancia en los últimos 30 años como la recorrida por el mundo industrializado en una centuria", según el informe.
Pero Jolly advirtió que este progreso no se ha distribuido de modo equitativo. La expectativa de vida en Africa subsahariana, de 50 años, es 19 años menor que la de Asia oriental.
El estudio también indica que las mujeres no sólo recibieron menos dinero que los varones que efectúan la misma labor, sino que, además, están más acuciadas por las responsabilidades reproductivas y el trabajo no remunerado en el hogar.
Para colmo, las mujeres tienen menor acceso a la tierra, al crédito y a las oportunidades de empleo. Condiciones más equitativas contribuirían a que ellas y sus hijos escapen de la pobreza.
En segundo término, varios de los 48 países más pobres y menos industrializados del mundo tuvieron avances mucho menores que el mundo en desarrollo tomado como un todo.
En Asia meridional vive la mayoría de la población mundial en situación de pobreza humana y 510 millones de personas pobres en términos de ingreso. Si a esta región se suman el este y el sudeste de Asia y el Pacífico, allí residen 950 millones de los 1.300 millones de personas pobres según su ingreso.
Africa subsahariana es la región que sufre mayor incidencia de pobreza humana, y donde este indicador crece con más rapidez. Unos 220 millones de personas son pobres en términos de ingreso.
En América Latina, la pobreza humana está menos generalizada que la pobreza por bajos ingresos, que afecta a 110 millones de personas, pero ambas crecen.
Los países de Europa oriental y la Comunidad de Estados Independientes sufrieron el mayor deterioro en los últimos 10 años, cuando sus pobres en términos de ingreso pasaron de cuatro millones en 1987-1988 a 120 millones en la actualidad.
Los conflictos violentos, el sida y la degradación ambiental contribuyeron a crear y recrear la pobreza, destaca el estudio.
Estos factores "empujaron a millones de personas hacia la pobreza en los últimos 15 años, erosionando sus bienes y destruyendo sus vidas", agrega el informe.
"Ninguno de estos sucesos era inevitable, y todos podrían revertirse si los países abordan con más seriedad el compromiso ya asumido de dar a la reducción de la pobreza una alta prioridad, tanto en el plano nacional como internacional", urgió Jolly. (FIN/IPS/tra-en/td/ml-mj/dv/97