Cuauhtémoc Cárdenas, postulante del centroizquierdista Partido de la Revolución Democrática (PRD) para gobernar la capital mexicana, con 11 millones de habitantes, encabeza cómodo las encuestas para las elecciones del 6 de julio.
Un sondeo de la Fundación Rosenblueth difundido este martes le dio 33 por ciento de apoyo, contra 17 por ciento a Carlos Castillo, del derechista Partido Acción Nacional (PAN), y 15 por ciento a Alfredo del Mazo, del oficialista Partido Revolucionario Institucional (PRI).
El número de indecisos más el de quienes no consideran que haya una opción política válida (que representan posibles abstenciones o votos en blanco) descendió de 25 a 19 por ciento.
La firma encuestadora informó que el sondeo se hizo entre el 27 y el 30 de mayo sobre una muestra aleatoria de 2.500 personas, distribuidas por cuotas de edad y niveles de ingreso, en 400 lugares públicos de las 16 delegaciones capitalinas.
El error estimado es de 2,5 por ciento en los totales y de 6,5 por ciento para los grupos sociales y las delegaciones.
Según el estudio hay correlación clara entre ingresos y opciones electorales. A mayor poder económico corresponde una preferencia por el PRI, en los sectores medios-altos prevalece el PAN y los de medianos y menores recursos respaldan al PRD.
Las mayores preferencias en favor del PRD se dan entre estudiantes, obreros, las denominadas "amas de casa" y los pequeños comerciantes.
También el PRI recibe apoyo de los comerciantes, pero de los de mayor nivel socioeconómico.
Además del gobernador de la ciudad de México, en los próximos comicios se elegirán otros seis gobernadores y legislaturas estatales, y en el ámbito federal se renovará integramente la Cámara de Diputados y en parte el Senado.
En los estados donde se celebran consultas locales también se renovarán los cargos de alcaldes municipales.
Hasta el momento, las campañas preelectorales capitalinas se han caracterizado por el intercambio de acusaciones de corrupción e ineficacia entre los candidatos de los tres principales partidos políticos.
El más atacado fue el propio Cárdenas, a quien Castillo Peraza y Del Mazo señalan casi cotidianamente, pero sin lograr convencer, como favoreciendo a familiares con fondos o recursos a los que tuvo acceso en ejercicio de la función pública.
Hace más de 12 años, antes de su ruptura con el oficialismo, el candidato centroizquierdista fue gobernador del estado de Michoacán, en el centro del país, y en 1988 su candidatura presidencial obtuvo allí más del 65 por ciento de los votos.
Cuauhtémoc es hijo de Lázaro Cárdenas, presidente mexicano entre 1934 y 1940, y sostiene haber ganado la elección presidencial de 1988, en la que las autoridades reconocieron como triunfador a Carlos Salinas.
En 1989, tras asumir Salinas, Cárdenas creó el PRD, que volvió a postularlo para la presidencia en los comicios generales del 21 de agosto de 1994, ganados por el actual presidente Ernesto Zedillo.
En esa última consulta el PRI obtuvo 48 por ciento de los votos, el PAN 27 y el PRD 17 por ciento.
Entre otras medidas, Cárdenas plantea convertir en municipios las 16 delegaciones políticas capitalinas a fin de descentralizar el gobierno de la capital y conferirles una autonomía política y económica que dé protagonismo a sus habitantes.
También prometió ampliar la cobertura de los servicios públicos y la asistencia social sin dejar de estimular a la iniciativa privada.
En el ámbito nacional las encuestas muestran una creciente paridad entre el PRI, el PAN y el PRD, lo que podría determinar que, por primera vez en la historia, el oficialismo no disponga de mayoría absoluta propia en el Congreso.
El panorama electoral se ensombreció los últimos días de mayo, al producirse en el estado meridional de Guerrero una serie de choques armados entre el ejército gubernamental y la guerrilla, donde perdieron la vida nueve combatientes de ambos bandos.
Dos organismos no gubernamentales coincidieron el lunes 2, tras visitar la región, en que las fuerzas de seguridad del estado practican allí una "represión indiscriminada" contra autoridades de cooperativas agropecuarias y la población civil.
La Red Todos los Derechos para Todos y el Comité de Derechos Humanos José María Morelos denunciaron que hay poblaciones "prácticamente sitiadas" y que crecen los casos de "secuestros, torturas, detenciones arbitrarias y allanamientos".
El actual proceso electoral "intermedio", entre el comienzo y el fin del actual mandato sexenal presidencial, es considerado importante como antecedente de las elecciones generales del 2000. (FN/IPS/emv/dg-mj/ip/97
