El presidente de Uruguay, Julio Sanguinetti, instaló hoy en Venezuela un encuentro de 600 empresarios -de los cuales 150 uruguayos- que busca incrementar el comercio bilateral, de 50 millones de dólares anuales.
La base de los intercambios previsibles es la oferta uruguaya tradicional, de carnes, cueros y lanas, así como la más reciente de lácteos, cítricos, electrodomésticos y fibras sintéticas.
Del lado venezolano, la oferta es de derivados de petróleo, químicos y petroquímicos, frutos tropicales, herramientas y otros insumos para la industria metalúrgica liviana, la química, la de frigoríficos, la cosmética y la hotelería en Uruguay.
Antes de la instalación del encuentro, Sanguinetti encabezó uno específico de 30 operadores turísticos uruguayos con pares venezolanos en la estatal Corporación de Turismo.
Luego acudió a un encuentro con el presidente venezolano Rafael Caldera, básicamente consagrado al diálogo político motivado por "la recomposición del mapa político mundial tras la caída del bipolarismo en 1989", según anticipó Sanguinetti.
La prensa local recogió criterios de la uruguaya según los cuales Sanguinetti, de 61 años y quien gobierna Uruguay por segunda vez, rechaza la posibilidad de buscar un tercer mandato pero en cambio no descarta una posible postulación futura para la secretaría general de las Naciones Unidas.
Sanguinetti adelantó que con Caldera revisaría la situación política internacional y regional, con énfasis en el respaldo necesario para el proceso de integración. "Venezuela es nuestro puente hacia el Caribe", dijo.
Caracas es el socio de la Comunidad Andina (Bolivia, Colombia, Ecuador y Venezuela) que más trabajo ha adelantado para un acuerdo de libre comercio con el Mercado Común del Sur (Mercosur, de Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay) y cuya secretaría asume Montevideo el próximo semestre.
En paralelo, los cancilleres Alvaro Ramos (Uruguay) y Miguel Angel Burelli (Venezuela) daban los últimos retoques a los acuerdos que suscribirán este martes, de menor vistosidad que el diálogo político y la búsqueda de negocios entre empresarios.
Se trata de un memorando sobre cooperación educativa, un tratado de extradición, otro de asistencia jurídica recíproca en materia penal, un cuarto de promoción y protección de inversiones y un quinto para la aplicación en sus territorios del Convenio Iberoamericano de Seguridad Social.
Sanguinetti, quien permanecerá en Venezuela hasta que el miércoles viaje a Miami (Estados Unidos), hablará ante el Congreso en una conferencia interparlamentaria Europa-América Latina y en la sede del Sistema Económico Latinoamericano.
También recibirá un doctorado Honoris Causa de la estatal Universidad Simón Bolívar, de Caracas.
La suya es la primera visita a Venezuela de un presidente uruguayo en ejercicio, y corresponde a la que efectuó Caldera a Montevideo en 1995.
Venezuela rompió relaciones diplomáticas con Uruguay en 1976, cuando agentes del entonces régimen militar uruguayo violaron la extraterritorialidad de su embajada en Montevideo para secuestrar a una opositora, y sólo las restituyó cuando al país del sur retornó a la democracia, en 1985. (FIN/IPS/jm/dg/ip-if/97