Autoridades de México pidieron hoy a la población que vive en las cercanías del volcán Popocatépetl, que en las últimas horas registró las emanaciones de gas más importantes en los últimos tres años, mantenerse en alerta ante una posible orden de desalojo.
Los 1.119 refugios están listos, así como el plan de contingencia, señalaron las autoridades luego de que el volcán, ubicado a unos 100 kilómetros de la ciudad de México, expulsó una importante cantidad de ceniza y gases que cubrieron parte de la ciudad de Puebla y sus alrededores.
Defensa Civil recomendó a la población cubrirse el rostro con pañuelos mojados, no hacer ejercicio físico y en lo posible mantenerse en lugares cerrados.
El Popocatépetl, volcán a 5.452 metros de altura sobre el nivel del mar, registra emanaciones de gas, expulsión de material incandescente y pequeños sismos desde diciembre de 1994.
Las autoridades, que monitorean la actividad del volcán con sofisticado aparatos y mantienen vigentes planes de desalojo para alrededor de 400.000 personas, indicaron que las explosiones registradas la noche del domingo, son las más importantes desde 1994.
Protección Civil reconoce que pese al intenso trabajo de prevención que se realiza en los alrededores del volcán, donde hay 435 comunidades de campesinos, en su mayoría pobres, la falta de caminos adecuados y la resistencia de la gente a dejar sus hogares podría dificultar un desalojo de emergencia.
El cráter del Popocatépetl, nombre indígena que significa montaña que humea, apunta sus desfogues hacia la zona de Puebla, ciudad ubicada a cerca de 130 kilómetros al sureste de la capital.
"Se tiene que tener conciencia que el volcán está activo y puede ocurrir algo mayor en cualquier momento, aunque lo podemos predecir con horas o incluso días de anticipación", señaló Claus Siebe, investigador del Instituto de Geofísica de la Universidad Nacional Autónoma de México. (FIN/IPS/dc/dg/en/97)